Julio Canela, es un delantero peruano de 30 años y es uno de los nuevos elementos del renovado equipo de fútbol sala del Cacique dirigido por Carlos Véliz y que hoy lucha por volver a la Primera División de este deporte.

 

Lleva casi 12 años en Chile, donde vino en busca de nuevas oportunidades de surgir y ahora le tocó la posibilidad de defender a los albos, algo que considera como el regalo más lindo que le dio la vida.

Es hincha de Alianza Lima, club que comparte una amistad institucional muy fuerte con Colo Colo, incluso fue al Estadio Monumental para ver al equipo de sus amores enfrentar a Palestino.

Julio Canela alentando a Alianza Lima en el Monumental

Tuvo la posibilidad de ser futbolista profesional estando en el equipo juvenil de Cienciano, pero por problemas personales no pudo alcanzar ese sueño.

Su entrenador lo califica como alguien introvertido, humilde y de pocas palabras, pero muy valioso por sus cualidades técnicas para jugar. Julio Canela conversó con Dale Albo sobre su experiencia en el club.

¿Cuáles han sido tus sensaciones en el equipo de futsal de Colo Colo y con el trato que haz recibido del club?

Es una de las cosas más grandes que me ha tocado vivir. Llevo muchos años practicando el fútbol sala y he vivido cosas muy bonitas, pero lo que estoy viviendo ahora es increíble, ser parte de un club tan hermoso que representa tanto es una sensación inexplicable y me hace ser un agradecido de la vida.

El trato ha sido de lo mejor, desde el técnico, el kine, nutricionista o hasta los sub 20, es gratificante. Ahí uno se da cuenta de la clase de equipo en el que estoy, hay mucha unión y es realmente lo más lindo que me ha tocado.

¿Cómo te has sentido con tu rol en el equipo de futsal?

Muy bien, tengo el apoyo de todos, sobre todo de mis compañeros que me motivan día a día para ser el aporte que el club necesita.

¿Qué proyecciones haces de ti en Colo Colo en el corto plazo?

En estos momentos me siento demasiado bien en Colo Colo, sobre todo por el compañerismo que hay. En el corto plazo tengo muchos objetivos, ojalá dentro del club. Mi gran anhelo es subir a Primera con Colo Colo y el sueño más hermoso que tengo es ser campeón en Primera con este club y jugar la Copa Libertadores. Pero iremos paso a paso.

¿Cómo ves al equipo en el torneo?

Lo veo muy sólido. Aunque sea un plantel experimentado, con jugadores de selección, tenemos mucho que aprender y trabajar. Pero creo que hasta el momento somos un equipo fuerte que va paso a paso a su objetivo de subir a primera.

 

En comparación con otros clubes donde te tocó jugar ¿Qué es lo que mas resaltas de Colo Colo?

Muchas cosas, sobre todo al cuerpo técnico y mis compañeros. Se hace todo de lo más profesional, se brinda la ayuda adecuada y eso es una motivación extra para que uno siga poniendo de su parte.

¿Cómo ha sido tu vida en un país extraño, lejos de los tuyos?

Es muy difícil, sobre todo cuando estás solo, se vuelve muy complicado. Gracias a Dios yo tengo a los míos aquí cerca, llevo doce años aquí y tengo a mi madre, hermano y dos hijos que son mi motor para seguir adelante.

Tuviste la posibilidad de ser jugador profesional ¿Puedes contarnos esa experiencia?

Antes de venir a Chile estuve jugando en Cienciano, en el equipo sub 20, justo en el año que fue campeón de la Copa Sudamericana (2003). Fue una etapa como de un año y no tuve la oportunidad de saltar al profesionalismo. Me hubiese gustado dar ese salto, pero como tuve otros temas personales, como mi viaje a Santiago, dejé todo atrás.

¿Y por qué elegiste dedicarte al futsal?

A los 19 años tuve una opción en Santiago Morning, estuve a punto de entrar, pero por motivos personales se me cerraron las puertas. Ahí fue cuando empecé a practicar el futsal y le tomé mucho amor y aprecio. Hoy en día me abre las puertas de estar en Colo Colo y eso es fruto del esfuerzo y estoy muy agradecido por las decisiones que tomé.