El 2018, Colo Colo avanzó a octavos de final de Copa Libertadores tras 11 años sin lograrlo. Los albos habían tenido un pésimo arranque en el certamen con Pablo Guede, sumando apenas un punto de nueve posibles, pero pudieron revertir la situación al mando de Héctor Tapia.

Con Tito en la banca consiguieron valiosos triunfos sobre Delfín y Bolivar y se jugaron la clasificación ante Atlético Nacional en Medellín. Aunque se hizo un planteamiento más conservador, lograron el punto que necesitaban para meterse entre los 16 mejores de Sudamérica, lo que fue elogiado por Hernán Torres en conversación con DaleAlbo.

“Héctor me parece una persona muy inteligente y tengo un gran respeto por él, fuera de lo que planteaba como entrenador, donde fue campeón en Colo Colo que no es poca cosa. Lo que me cautivó a mí fue cuando me va a buscar a Antofagasta y me dice ‘mira este es el plantel que hay, no lo puedo conducir solo, necesito a alguien fuerte y que nos ayudemos’. Fue muy transparente y decidí acompañarlo. Tuve que hablar con el presidente de Antofagasta para venir y explicarle que Colo Colo es mi casa", comenzó recordando su regreso al club.

 

Al llegar al Cacique se encuentra con un equipo que físicamente daba ventajas y eso jugaba en contra, sobre todo en el plano internacional. “Vi un equipo muy poco atlético, bajaba mucho en los segundos tiempos, pero con enormes jugadores. Ahí nos enfocamos en la destreza, llegué y me conecté con los que manejaban el liderazgo, logrando un consenso importante. Hicimos una pretemporada progresiva por el nivel de edad que tenía el plantel, muchos sobre 30 años, entonces tenía que manejar algo muy controlado para que el equipo pudiera rendir en la segunda parte”, explicó.

El equipo visitaba Manta para enfrentar a Delfín, donde el único resultado que servía era ganar y Torres recordó la charla previa con el plantel: “le dije a los jugadores ‘no podemos perder con este equipo’, pueden tener más ganas, pero la diferencia futbolística era terrible y se demostró a grandes ratos”.

Para el partido contra Atlético Nacional, el Nano recuerda que tuvo que darle un lapidario consejo a Tapia. “Los dos laterales los conocía, los tuve en Argentina, unas gacelas, los tipos volaban. Los vi atléticamente y le dije a Tito ‘no tenemos ninguna posibilidad de ganarle corriendo a este equipo’. Le dije que intentemos achicar el campo".

Posteriormente "Héctor se junta con Gabriel Ruiz-Tagle y le dice ‘mire Gabriel, vamos a hacer una propuesta un poco mezquina, pero venimos a buscar un resultado que nos deje en la otra etapa’. Abandonamos ‘el todos los indios para adelante’, pero vamos a jugar a algo más conservador, que era lo que necesitábamos”, explicó.

Añadió que “si jugábamos a campo largo contra la velocidad de ellos, con Macnelly tan libre metiendo pases a sus delanteros, íbamos a caer en una debilidad y Pitana (árbitro) nos podía meter en nuestra mitad. En ese partido fue muy importante Orión, yo digo siempre ‘dámelo’. Quizás no es Spider Man y llega a un ángulo como Claudio Bravo, pero tiene un liderazgo y te maneja situaciones que te hacen ganar partidos”.