Por los palos, como se dice en la hípica. Así apareció el nombre de Omar Labruna y hoy es la primera opción para tomar el banco de Colo Colo para el segundo semestre, por sobre Pablo Marini.
La historia es así: ambos nombres fueron presentados y visados por el director deportivo, Juan Gutiérrez. El hijo de Ángel reúne consenso total mientras que Pomelo no.
El tema pasa por la cláusula de salida del todavía adiestrador de Audax Italiano: fluctuaría entre US$ 300 y US$ 500 mil. Y el dinero tras las nefastas administraciones no abunda, precisamente, en Blanco y Negro.
El grente deportivo itálico, Lorenzo Antillo, comentó que “la verdad este es un tema bastante sensible. Yo sé que ellos se comunicaron con Omar, él tiene toda la libertad de conversar con quien quiera. Es cierto también que existe una cláusula de salida, por lo tanto, nosotros no podemos limitar a nuestro entrenador a conversar y si alguien quiere pagar es cláusula, no nos opondremos”.
Además, confesó que “lógicamente para Audax no es agradable que a dos semanas que comience el torneo, exista la posibilidad de que podamos quedarnos sin técnico. Si esta situación es cierta, tendremos que actuar rápido para traer a otro entrenador. Estamos preparados, tenemos una lista y esperamos no tener problemas”.
En las últimas horas ha trascendido que el propio Labruna estaría dispuesto a cancelar parte de su salida de La Florida y que está en negociaciones para llegar al Monumental con los regentes de Audax. Los tanos ya piensan en reemplazantes.