Esta semana no fue positiva para los equipos chilenos en las copas internacionales. Si bien las campañas han sido buenas, Palestino, la U. de Conce y la Católica perdieron sus lances en la Libertadores en esta fecha.

Pese a ello, Mario Salas, DT de Colo Colo, aplaude lo hecho hasta ahora. “Soy una persona positiva, me gusta ver el vaso medio lleno. La participación de los equipos chilenos en la Libertadores ha sido notable. Palestino todavía pelea, veo a Católica con un pie en la nueva fase y la U. de Conce está bien. Más allá de los resultados, que no fueron buenos esta semana, este posicionamiento chileno se veía hace mucho tiempo. A tres equipos peleando a falta de dos fechas. Todos han sido protagonistas. A Palestino da gusto verlo, se para de igual a igual frente a uno de los grandes de Sudamérica, va a dar la pelea hasta el final. A Católica la he visto muy bien y a la U. de Conce, que tuvo un traspié ayer, pero la veo con estas ganas, con esta actitud de querer ir por más”, reflexionó el Comandante.

“Más allá de lo técnico, táctico, físico, creo que nos han mostrado el camino en cuanto a actitud mental, a ganas, al entender que para pasar de fase no sólo es necesario el cuerpo técnico y jugadores, es una visión de club. En la logística y muchas cosas es importante lo que plantee el club. Han mostrado que quieren pasar y me quedo con esa idea, más allá de los resultados. Me da gusto ver a los chilenos en copas internacionales. Pasó con Calera en la Sudamericana también y seguirá pasando con Colo Colo”, profundizó.

Sobre los motivos que han llevado a esta mejora internacional, el DT cree que el hacer un certamen anual puede haber dado un empujón. “Da para un análisis. La urgencia en el Campeonato Nacional se puede soslayar un poquitito donde el torneo es largo. Si fuera corto a lo mejor estaría la urgencia y no se llevarían a cabo ciertas dosificaciones. Seguramente algo tiene relación. A mí me gusta más el torneo largo, como está organizado acá en Chile ahora”, meditó.

Eso sí, para el final se guardó lo picante: el famoso “juegue-juegue”, una orden no escrita que tienen los árbitros de darle mayor continuidad al juego. Para Salas puede que aporte dinámica, pero también advirtió que se está yendo de las manos.

“Podría ser un motivo también el ‘juegue-juegue’, pero lo que pasa en Chile es tremendamente exagerado por parte de los árbitros. Me imagino que se llegará a un equilibrio. En partidos que he visto se han producido goles por faltas que no se han cobrado y eso es tremendamente peligroso, hay que reconsiderarlo porque es determinante en el resultado. Si queremos que se juegue más, que sea más continuo, no es sólo el ‘siga-siga’. Es también la entrada del área médica, los jugadores lesionados, los minutos de descuento. Contra Católica nos dieron cuatro o cinco y jugamos dos. Ahí no hay una coherencia con lo que se busca. Es un paso para y puede que esté ayudando, pero es tremendamente exagerado”, sentenció el entrenador.