Aníbal Mosa logró que se llamara a una junta extraordinaria de accionistas este viernes 6 de abril. En ella, pretende revocar a todo el directorio y llamar a nuevas elecciones, donde incluso él podría volver a la presidencia y sacar a Gabriel Ruiz-Tagle del poder.
Pero, ¿por qué hizo esto? “Queremos investigar lo que sucedió en la elección de abril. Buscamos transparentar. El actual presidente, Gabriel Ruiz-Tagle, llegó de una forma irregular a la presidencia. Hemos pedido a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) que investigue, poniendo a disposición todos los antecedentes que tenemos”, comentó el empresario a El Mercurio.
“Sospechamos que seis o siete corredoras votaron en bloque, con porcentajes muy similares, y por cinco directores, uno de ellos Ruiz-Tagle. Cuadraron los votos. Parece muy extraño, sospechoso e irregular, que corredoras que manejan gran cantidad de acciones de minoristas hayan votado por los mismos candidatos. Colo Colo tiene seis o siete mil minoritarios y no creo que todos hayan votado por el bloque de Ruiz-Tagle”, profundizó.
Además, dijo que, según su punto de vista, “Ruiz-Tagle y Leonidas Vial quieren controlar los destinos de Colo Colo con cuatro directores y para siempre. Por eso buscan el 42 o 44 por ciento. ¿Cómo? Sacando a la Corporación y dejándonos a nosotros con tres directores. Así, ellos administrarían con cuatro. Pero los colocolinos le van a pasar la cuenta, no pueden manosear a la Corporación. Ellos son la historia de Colo Colo. Hay que abrir los ojos, el colocolino debe estar atento: no podemos dejar que esta gente saque a la historia del club. Vial y Ruiz-Tagle quieren deshacerse de la Corporación y tener el camino libre para hacer lo que quieran”.
Al ser consultado sobre si el fin del grupo controlador es “borrar” a la Corporación y quedar cuatro contra tres en un directorio de siete, dijo que “exactamente. Es su objetivo. Y le hemos dicho a la CMF que investigue: este grupo de personas quiere administrar con un 44 por ciento todas las decisiones de Colo Colo y es inaceptable. Se juntaron tres personas a fumarse unos puros entre cuatro paredes y decidieron los destinos de Colo Colo, una institución que le pertenece a más de nueve millones de personas”.
Finalmente, dijo que no tiene problemas en volver él al sillón máximo. “Sí, claro. No es un cargo sencillo, pero tengo más transparencia y más legitimidad que el actual presidente. Tengo las manos limpias. Y la conciencia tranquila”, cerró.