Carlos Muñoz vive un buen presente en Colo Colo. Es el goleador del Clausura con ocho tantos y titular inamovible para Omar Labruna. Todo esto podría traducirse en un adiós pronto, pero él no cree que así sea.
“No niego que este equipo es una buena vitrina. Todos están pendientes y con lo poco que he hecho, siento que me he ganado un cariño. Por eso quiero quedarme un tiempo y ganar algo. La oferta del Pescara era súper buena para mí pero no tanto para Wanderers y Colo Colo, que son los dueños del pase. Pero ya llegarán más opciones. No estoy desesperado ni tengo la necesidad de ganar más plata o irme luego. Si ando bien, todo se dará a su tiempo”, comentó en diálogo con El Mercurio.
Además, dijo de la buena racha que “nos merecemos esto. Como grupo hemos pasado muchas cosas. En lo persona, hay asuntos que, como futbolista, uno nunca piensa que pasarán. Pero después de tanta mala, una buena tenía que llegar. Aunque pasó tanto tiempo. Y ahora lo estamos disfrutando al máximo, el domingo se ve que estamos disfrutando en la cancha, que la gente se va contenta a sus casas”.
Sobre la identificación, expuso que “no puedo negar que soy wanderino desde chico, pero inconscientemente me impregné de la pasión de la gente. Hasta mi hija, Catalina, se sabe las canciones del Colo y conoce a los jugadores”.
Finalmente, y sin nombrarlo, reconoció que tiene cuentas pendientes con Johnny Herrera. “Me han dado muchas ganas de responder sus comentarios. No sé cómo me aguanto. Debe ser que no me gusta meter ruido. Quiero decirle las cosas a la cara, nada de conferencias. Aquí varios le tienen bronca. Con el resto de los jugadores de la U no hay ningún problema, pero con él… Las cosas se comentan de frente y no por la prensa”, disparó.