Los superclásicos durante este nuevo milenio han estado marcados por la enorme supremacía de Colo Colo sobre Universidad de Chile, al punto de que se van a cumplir 10 años sin derrotas y 22 sin caer como local. Incluso, los albos se han dado el gusto de vencer al archirrival en finales, donde una que marca a fuego a los hinchas es la del 2006.
En dicha definición terminó de consolidarse la figura de Matías Fernández. Si bien el mediocampista ya deslumbraba al medio nacional con su talento, todavía no sabía de vueltas olímpicas con el Cacique y su primera gran oportunidad llegó nada menos que ante la U.
El Superclásico de Matías
Albos y azules definirían el título del Apertura 2006 tras haber pasado exitosamente todas sus llaves de play offs. Los entonces dirigidos por Claudio Borghi llegaban como favoritos por varios factores como el haber liderado la fase regular, ser el equipo más goleador y estar dotado de figuras llenas de talento como el propio Mati, Jorge Valdivia, Claudio Bravo o Humberto Suazo.
Lamentablemente, la final de ida no pudo jugarse con el marco de público deseado luego de que las autoridades fijaran el partido un miércoles 28 de junio a las 16:00 horas. De todos modos, los hinchas albos coparon el sector norte para ver una de las mejores presentaciones individuales del 14 de los blancos.
Las cosas eso sí no partieron bien para Colo Colo, ya que en apenas 13 minutos se encontraron en desventaja. Un córner servido por Mayer Candelo encontró la cabeza de Herly Alcazar y una apresurada salida de Claudio Bravo que no pudo evitar la apertura de la cuenta para los azules
No obstante, el gol no le quitó ánimos al equipo y Matías Fernández rápidamente se echó el equipo al hombro. De sus pies nacieron varias ocasiones de gol, además de tener vueltos locos a sus marcadores que sólo podían pararlo con infracciones y regalando jugadas de repertorio.
Matías Fernández fue un problema sin solución para Marcelo Díaz en la final de ida del Apertura 2006. / FOTO: Archivo
El empate no llegó hasta el segundo tiempo. Jorge Valdivia aguanta la pelota en el sector izquierdo, encuentra a Matías Fernández de frente al arco, el crack albo se acomodó para sacar un remate rasante hacia un rincón imposible para Miguel Pinto.
A partir de allí, todo sería para el Cacique, pero no encontró premio casi al final del partido. Al minuto 90, Matigol se generó un tiro libre que cambió por uno de los goles más recordados por los hinchas colocolinos en esta clase de partidos.
El resto es historia conocida. Los albos cayeron por 1 a 0 en la revancha, pero se impusieron en la definición por penales para levantar su estrella número 24 en el título conocido como “campeón en tu cara”. Por su parte, Matías Fernández tuvo una presentación consagratoria que mostraba que sabía aparecer también en partidos importantes.
