No cabe duda de que el 2020 ha sido un año de crisis importantes en Colo Colo, no solo deportivamente hablando, sino que dirigencial, con la polémica de rebajas de sueldos con los jugadores como el punto más complicado al interior de Blanco y Negro.
Esto ha generado todavía más divisiones entre los bloques liderados por Aníbal Mosa y Leonidas Vial, algo que lamentablemente venimos viendo como colocolinos hace ya bastantes años.
Uno de los hombres que ha sido protagonista en este tipo de polémicas es Harold Mayne-Nicholls, quien llegó a Colo Colo de la mano del propio Aníbal Mosa hace poco más de un año en el regreso del puertomontino a la presidencia de Blanco y Negro.
El ex presidente de la ANFP ha sido el objetivo de duros golpes a través de la prensa, tanto del bloque de Leonidas Vial como por parte de los jugadores, quienes no estaban a gusto al negociar con el antofagastino el tema de los sueldos rebajados durante la pandemia del coronavirus.
Ante eso, y según consignó el diario La Tercera en esta jornada, Aníbal Mosa mandó una señal para encontrar la paz extraviada con el plantel de Colo Colo: Apartó a Mayne-Nicholls de toda negociación con los jugadores para recomponer de una vez por todas las buenas relaciones del pasado.
La información del medio apunta que Mosa ha llevado desde hace un tiempo todas las negaciones para solucionar el conflicto salarial junto a Marcelo Espina, el gerente deportivo de Blanco y Negro.
Con este panorama el puertomontino enfrenta un complicado dilema en Colo Colo, ya que Mayne-Nicholls era su carta para llevar de mejor manera su segundo gobierno en Blanco y Negro, sobre todo en la relación con los jugadores, a quienes simplemente no sabía decirles “no” a sus peticiones.
Habrá que ver en que termina esto y cómo se lo toma el propio Harold Mayne-Nicholls, quien actualmente ejerce como director ejecutivo de Inmobiliaria Estadio Colo Colo pensando en la remodelación del Monumental.
