Colo Colo y Boca Juniors protagonizaron una semifinal de infarto en el Estadio Monumental. Tras el encuentro de ida en que los argentinos ganaron por la cuenta mínima, los ánimos comenzaron caldeados en la Ruca. De hecho, tras el tercer gol de los Albos en los pies de Rubén Martínez, se desató la batalla campal en el terreno de juego.

Alrededor de diez heridos y más de 120 detenidos en las afueras del recinto de Macul fue el saldo que dejó la denominada Batalla de Macul. En la cancha, el juez del compromiso sólo expulsó a Blas Giunta y a Patricio Yáñez y, tras 14 minutos de gresca, las acciones se reanudaron sin que el marcador se moviera.

La disponibilidad del Monumental para la final estaba en duda. La Confederación Sudamericana de Fútbol había tomado nota de lo ocurrido en aquella jornada y no eran pocos los que pensaban que el partido definitorio debería jugarse en otro reducto. Ahí fue clave el rol de Jorge Vergara, vicepresidente de Colo Colo en aquellos años. Es que el Guatón, como era apodado, fue muy ágil para negociar tras los hechos.

Es que, tras el pitazo final, Óscar Washington Tabárez, DT y Blas Giunta, quedaron en calidad de detenidos y fueron a parar a una comisaría capitalina. Ahí, además de tener que dar declaraciones, iban a quedar con la imposibilidad de salir del país por 50 días. Finalmente, por un pago de una fianza 50.000 pesos chilenos, fueron liberados.

Colo Colo venció 3 a 1 a Boca Juniors en 1991.

Colo Colo venció 3 a 1 a Boca Juniors en 1991. | Imagen archivo.

El rol clave de Jorge Vergara para que Colo Colo juegue en el Monumental

Además de la fianza, la liberación de los boquenses fue tras un acuerdo que se llegó con Colo Colo para que no se presentaran cargos. Vergara se encargó de llamar a la Confederación para saber qué iba a ocurrir y la respuesta fue obvia: No se juega en Macul. Fue ese el principal motivo para que el fallecido dirigente se pusiera en contacto con los argentinos y asegurarse de que no pasaría a mayores.

Es que Vergara se puso firme: Si la final no se jugaba en el Monumental, los argentinos no se van de Chile. Así, tras intensas negociaciones, las autoridades sudamericanas aseguraron que dicho partido se iba a disputar en Pedrero y, a la mañana siguiente, el plantel de Boca Juniors ya iba camino de regreso a Buenos Aires.

¿Quién fue Jorge Vergara en la historia del Cacique?

Sobre los episodios ocurridos tras el partido con Boca Juniors, el dirigente conversó con Redgol y confesó que “yo muy aleccionado por un dirigente de la Conmebol dije que no iba a dejar que se fueran mientras no firmaran un documento. Antonio Alegre, que era el presidente de Boca, me dijo que olvidáramos esto y lo dejáramos así”.

Vergara fue un ex oficial del Ejército que se dedicó a aprender distintas mañas a nivel sudamericano. De hecho, en aquella conversación, contó que “antes de enfrentar a Boca fui a Argentina a conversar con dirigentes de River Plate, de Independiente, de San Lorenzo. Aprendí mañas imperceptibles, recolecté información y sabía lo que nos iba a pasar”.