Si hay un fichaje que suele ser puesto como ejemplo de los malos negocios realizados por Colo Colo en el mercado de pases, ese es Darío Lezcano. El paraguayo, de buen currículum, llegó al Cacique con demasiados problemas físicos y nunca pudo demostrar nada de lo que se esperaba de él.
Apenas 13 partidos jugados durante 2023 y cuatro goles anotados, fue el saldo del jugador, quien terminó perdiendo el puesto con Damián Pizarro e incluso Leandro Benegas. Además, varias lesiones le impidieron agarrar siquiera un mínimo de continuidad.
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El problema es que Colo Colo lo contrató por dos años y luego del fiasco ocurrido en 2023, pocas ganas habían de que se mantuviera en el plantel. Jorge Almirón lo ocupó en algún amistoso, pero la intención era que saliera. La única chance que encontraron fue enviarlo a préstamo y hacerse cargo de su salario.
Así surgió la opción de Tacuary, club donde sus números bajaron todavía más. 24 partidos jugados y apenas un gol fue el saldo del otrora delantero del Ingolstadt, en la Bundesliga. Con ello, pocas ganas quedaron en el club paraguayo de buscar continuidad.
Lezcano encuentra un incomprobable equipo tras desvincularse de Colo Colo
Ya sin contrato, ni en Colo Colo ni en Tacuary, Darío Lezcano debía buscar club para competir en este 2025. Y tras mucho esperar, lo encontró. El guaraní jugará en el Club Atlético Tambetary, que logró el ascenso el año pasado a la Primera División de Paraguay.
Eso sí, aún falta la confirmación por parte del propio club, que en esta temporada marcha noveno, de doce equipos, en la categoría de elite guaraní. El objetivo del club es evitar el descenso y, si es que los resultados acompañan, intentar clasificarse para una copa internacional.
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Vale recordar que el paraguayo se fue de Colo Colo con fuertes críticas al manejo de grupo de Gustavo Quinteros. “Todo el mundo le tenía miedo a Gustavo Quinteros, nadie quería hablar porque él amenazaba a los jugadores. Decía ‘si ustedes hablan no van a jugar‘”, señaló.
“Para mí él es doble cara, eso no me gusta porque yo voy de frente. Me decía una cosa y hacía otra. Lo que me molestó fue que habló mal de mí en Emelec. Para diciembre se comunicaron otra vez conmigo y él habló diciendo que era viejo y que cómo iban a llevar eso. Yo no le hice nada, nunca le dije nada, nunca lo encaré”, agregó.
Darío Lezcano con la camiseta de Colo Colo
