Los jugadores de Colo Colo “no comen vidrio”, saben que no están en un buen momento futbolístico y pese a tener plena conciencia que esto pasa, lo que realmente le carga al plantel es que salgan los técnicos (o los propios compañeros) por la prensa a criticar al plantel.

Ya pasó con Gallego, quien varias veces “mató” públicamente a los jugadores, pasó hace poco cuando Paredes habló de la “Paredesdependencia” de este equipo y pasó ahora con los dichos de Basay el sábado después del duelo ante Ñublense.

Esta vez, el “Hueso” se aburrió de lo mostrado en cancha por sus jugadores y declaró que “hay muchas cosas que conversar con los jugadores. Hay una cuestión interna que tenemos que asumir. Todavía no se asume lo que tiene que ser Colo Colo, se puede ganar perder o empatar, pero debemos salir de una manera determinada. Todos los jugadores deben tener la misma actitud, pero hay veces en que solamente tres o cuatro son los que responden”, dijo.

Pese a que hoy Boris Rieloff le bajó el perfil y afirmó que las palabras del DT fueron “un tirón de orejas para que algunos jugadores o para que el plantel despierte y para que comience a jugar mejor”, mientras que Gutiérrez se limitó a decir que “queda en cada uno ver qué está haciendo bien o mal, para que el equipo salga a relucir”.

Lo cierto es que la relación del plantel con el cuerpo técnico hoy por hoy no es buena, de hecho, esta mañana hubo una larga charla previa al entrenamiento para zanjar este tema y se espera que a fin de año sean varios los cambios que Basay haga en el plantel y varios los jugadores que no sigan en el Popular.