Los 38 años no le han pesado a Claudio Bravo, quien sigue demostrando estar vigente para la alta competencia. Es titular en el Real Betis que pelea por meterse a copas europeas y ha sido fundamental para sostener la campaña del elenco que dirige Manuel Pellegrini, recibiendo varios elogios.
El portero formado en Colo Colo conversó con el canal oficial del club andaluz, donde analizó su buen presente, pero hizo también una sorprendente confesión respecto a su carrera, donde reconoció que pensó en retirarse tras salir del Manchester City.
“Mi idea es trabajar, disfrutar poco y seguir trabajando. Yo quiero terminar mi carrera bien, de la mejor manera posible. Si no hubiese tenido la oportunidad de dos años de contrato en un club, mi carrera se acababa en el Manchester City. La acababa y tranquilo, pero mover a mi familia para una temporada, imagínese ahora pagando las cosas para irme. Es complejo. Quiero volver a mis raíces cuando termine mi carrera de buena manera”, lanzó.
En ese sentido, el llamado de Manuel Pellegrini fue clave para volver al fútbol español: “No tuve la fortuna de trabajar con él antes. Me lo encontré acá cuando me habló del proyecto que tenía en mente y ya sabemos de sobra la capacidad que tiene para trabajar con el grupo, sacar resultados que no se estaban dando y la manera de afrontar los partidos. Es muy valioso”.
Agregó que “yo aspiro a lo máximo. Satisfecho no quedo nunca. En parte sí me deja la tranquilidad de que la llamada de él era que el proyecto ese este, voy a aspirar esto, quiero que le equipo juegue de una manera distinta a la que se veía aquí, que salga a jugar todos los partidos para ganar, no para sufrir y con todos atrás. Quiero un equipo protagonista, que juegue de igual a igual con quien sea y que aspire a los puestos de arriba. Y es donde estamos hoy en día. Satisfecho estaré si al final de temporada logramos el objetivo y podría decir sí o no pero nos falta lograr lo que tenemos en mente”.
De todos modos, ahora Bravo es feliz y se ve compitiendo: “estoy contento, con la ilusión de ver cómo vamos a acabar la temporada. Creo que es lo que nos mantiene con esa sensación también positiva, de querer aspirar a grandes cosas y que el club no esté reflejado en resultados en la parte baja. Es lo que tenemos en mente desde el inicio de la temporada”.
Finalmente, se refirió a las lesiones que sufrió durante esta temporada y que incluso le costaron la titularidad. “Me he llevado tirón de orejas, porque es parte del conocimiento de cada uno que debe tener. Llevaba ocho o nueve temporadas de dinámica distinta, de jugar domingo y miércoles, y me cambió aquí la dinámica. La semana es más larga, hay más carga en el entrenamiento y me tuve que ir adaptando cuando me tocó lesionarme un mes dos o tres veces. Eso nunca me había pasado en mi carrera. Es por la exigencia de cada uno. Me tocó en dos oportunidades, jugábamos visita y mi idea era ir a entrenar con normalidad al día siguiente con los compañeros, como en toda mi vida, pero lo tuve que hacer diferente. Ahora me lo tomo más tranquilo, y me adapto un poco a la edad. Me encantaría tener 25 años y no los tengo”, cerró.