Una vez más, a Colo Colo le suspenden un partido en lo que va del año. Esta vez fue el partido contra Universidad Católica, por la fecha 5 de la Liga de Primera, luego de la decisión de la ANFP, acogiendo la solicitud de los cruzados de reprogramar el compromiso por los problemas para encontrar localía.

El insólito estado de la cancha del Santa Laura y la imposibilidad de la UC para encontrar otro estadio que acoja el partido ante Colo Colo fueron argumentos suficientes para que se suspenda el partido, dejando al Cacique nuevamente sin fútbol y a 16 días de jugar su próximo partido por el Torneo.

Previo a la decisión de la ANFP, desde la Cruzados se defendían, señalando que “es un caso de fuerza mayor”. “Hemos formalizado nuestra petición para que el encuentro sea movido. Confiamos en que el directorio de la ANFP considere nuestra solicitud, tomando en cuenta sus competencias y el antecedente de la suspensión del partido de hoy (Unión Española vs La U)”, aseguró Juan Tagle.

Además, aseguraron que intentaron invertir la localía la semana pasada, pero que no hubo respuesta por parte de Colo Colo. “Ahora está planteando esa opción nuevamente, pero no se puede obligar a nuestro club a cambiar la localía o a jugar en una ciudad lejana”, aseguró.

“Además, existe un inconveniente deportivo considerable, ya que tendríamos que disputar cuatro partidos consecutivos como visitantes en un período crítico”, criticó el mandamás de la sociedad anónima de la UC.

¿Por qué es antirreglamentario el recurso de la UC para suspender el partido ante Colo Colo?

Sin embargo, esos argumentos se contradicen con las propias bases del torneo. Primero, el artículo 23, que señala que “la obligación de tener a disposición el estadio respectivo para la realización de un partido será responsabilidad exclusiva del equipo que actuare como local“.

Aquel artículo agrega que “en el evento que no se pudiere disputar un partido en la fecha y hora programada, por no estar a disposición y/o en condiciones adecuadas el estadio designado al efecto, salvo fuerza mayor debidamente calificada por el Tribunal Autónomo de Disciplina, el club que debía actuar como local será sancionado con la pérdida del partido, otorgándose los puntos al equipo rival, el que se entenderá como triunfador, por un marcador de 3×0“. Aquel argumento de fuerza mayor fue precisamente el acogido por el Tribunal.

En tanto que en el artículo 19 se señala que “el Directorio podrá programar y/o reprogramar, en el más breve plazo, los partidos en Estadios distintos de aquellos inscritos por cada club, cuando concurra alguna de las siguientes circunstancias:

  • a) Que el estadio pertinente, a su juicio o en opinión de la Delegación Presidencial respectiva, no ofrezca condiciones adecuadas de seguridad para los jugadores, cuerpo técnico, árbitros, dirigentes y/o espectadores.
  • b) Que el estadio pertinente se encuentre suspendido por resolución del Tribunal Autónomo de Disciplina u otro órgano competente de la Asociación.
  • c) Que, dentro del plazo de cinco días previos a la realización del partido, el club no haya definido el estadio en el que ejercerá su localía.

Es decir, en el caso del partido de Colo Colo con la UC, si la ANFP consideraba que no se daban las condiciones para restarle los puntos a los Cruzados, en el mejor de los casos aplicaba ese último punto, en el cual la ANFP se hacía cargo de buscar un estadio para que se pudiese jugar, incluso fuera de Santiago, contradiciendo la frase de Tagle en la cual señala que el ente rector del fútbol chileno no los “podía obligar” a jugar en una ciudad lejana. Las bases dicen otra cosa.

Por ende, la UC no solo se negó a invertir la localía, también de forma antirreglamentaria presionó para que la ANFP no reprograme el partido fuera de Santiago, dejando solo la opción que los favorecía a ellos: suspender y reprogramar, dejando a Colo Colo con más de dos semanas sin Liga de Primera.

Juan Tagle logró que le suspendieran el partido ante Colo Colo