Tras problemas en el ingreso, protestas por el abandono de la prensa, pifias para dejar entrar a accionistas que llegaron atrasados, un par de intervenciones del presidente del CSD Colo Colo, Raúl Laban, y reclamos a los 112 millones de pesos pagados a Arturo Salah por concepto de asesorías, los que en rigor corresponden a su sueldo, se procedió a votar el nuevo directorio de la S.A en la junta de accionistas de Blanco y Negro.
No hubo mayores variaciones. Se pensaba que tras el “caso cascadas” Leonidas Vial se bajaría, pero finalmente seguirá en la mesa directiva, manteniendo también a Arturo Salah, pero reemplazando a su abogado José Tomás Errázuriz por el ingeniero Alfonso Gómez, quien ya estuvo en la mesa en 2005.
Por el lado de las acciones de Hernán Levylas cosas siguen igual, con el abogado Leonardo Battaglia y el vicepresidente del directorio de la Isapre Consalud,Pedro Grau, al igual que el de Aníbal Mosa que lo tendrá a él como representante junto a su fiel escudero Paul Fontaine.
Los cambios vienen por el lado de la Corporación CSD Colo Colo, pues dejarán el directorio Vanina Anabalón y Patricio Rojas y sus lugares lo ocuparán el ídolo albo Carlos Humberto Caszely y el empresario Walter Oliva, quien es sostenedor de varios colegios y fue ex marido de la bajada Subsecretaria de Educación, Claudia Peirano, cuestionada, precisamente por el lucro en los establecimientos educacionales de su ex marido.