Antes de ser entrenador, Gustavo Benítez tuvo una destacada trayectoria como un aguerrido defensa central, siendo seleccionado paraguayo en 45 partidos y campeón en nueve oportunidades con el Olimpia de su país.

Sus grandes campañas como jugador en el Rey de Copas paraguayo, fueron aval para poder asumir la conducción técnica. Primero de ayudante y luego como entrenador, realizando una destacada campaña en la Copa Libertadores de 1994, alcanzando las semifinales.

Ese fue el antecedente que le permitió llegar a Colo Colo en 1995. Pese a un primer año lleno de cuestionamientos, viendo como Universidad de Chile se quedaba con el título y eliminado en la liguilla pre Libertadores, no se dejó doblegar y el trabajo que vendría posteriormente fue espectacular.

A nivel nacional obtuvo el campeonato de 1996, 1998 y el clausura de 1997, además de la Copa Chile de 1996.

En el plano internacional alcanzó las semifinales de la Copa Libertadores, cayendo por penales ante Cruzeiro y llegó a la misma instancia en la Supercopa Sudamericana, cayendo contra Sao Paulo después de una primera ronda brillante que dejó en el camino a Boca Juniors e Independiente.

En ese plantel brillaban varios referentes como Marcelo Barticciotto, Marcelo Espina, Ivo Basay, Marcelo Ramírez, Claudio Arbiza, José Luis Sierra, Juan Carlos González, Pedro Reyes, Fernando Vergara, Francisco Rojas, entre otros.

Benítez también proyectó a varias figuras de las divisiones menores que fueron importantes en el transcurso de los años como Héctor Tapia, Manuel Neira, Frank Lobos, David Henríquez, Luis Mena, Pablo Contreras, Nicolás Córdova, Francisco Arrué o Sebastián González.

Otros no depuntaron con Colo Colo, pero sí en primera división como Felipe Nuñez, Manuel Villalobos, Álvaro Sarabia o Rodrigo Sanhueza.

Era un equipazo, no sólo tenía un once espectacular, sino que una banca abundante, llena de energía y amor por el club, cuando el fútbol no aparecía, se volvía un equipo aguerrido que incomodaba a cualquiera. Lamentablemente sólo faltó otro título internacional.

Pese a vivir  un segundo ciclo para el olvido, es imposible para el colocolino mirar con recelo a Gustavo Benítez. Se puede comprender que para el 2013 no existía la solidez institucional de finales de los 90.

El legado dejado por el adiestrador paraguayo es la clara demostración de su influencia, ya que muchos se convirtieron en entrenadores o desempeñan algún cargo deportivo. Por ejemplo Marcelo Barticciotto, Marcelo Espina (entrenador y hoy gerente), Fernando Vergara, Ivo Basay, José Luis Sierra, Pedro Reyes (ayudante), Marcelo Ramírez, Claudio Arbiza, Nicolás Córdova, Luis Mena, Emerson Pereira o el actual técnico de los albos, Mario Salas.

En la década de los 90 deslumbró sin tantos recursos ni infraestructura como tiene Colo Colo en la actualidad, lo que resalta más su labor. Hoy no se puede olvidar a un hombre que entregó mucho al club y se autodefinió como un "orgulloso indio".

Feliz cumpleaños Gustavo Benítez, un entrenador que escribió su historia en el Cacique con letras dorada.