Felipe Flores estaba en aprietos, ya que su casa en el barrio El Remanso de Chicureo estaba en riesgo de ser rematada por el no pago de la deuda que tenía el ex delantero de Colo Colo con Blanco y Negro.La concesionaria financió la compra del bien inmueble.
ByN demandó al Pipe en septiembre de 2016 por el incumplimiento de un pagaré, pero el delantero no propuso una solución. Hoy ya se encuentra más tranquilo y habló con La Tercera.
“Estoy más tranquilo. La intención siempre fue llegar a un acuerdo, pero las fórmulas no daban. La casa es mi mayor bien y no imaginaba perderla. Habría sido muy duro. Nunca quise tener problemas conColo Colo, que es el club que me formó y al que le tengo un cariño súper especial”, dijo.
Además le agradeció al nuevo director de Blanco y Negro,Harold Mayne-Nicholls por ayudarlo:“Sé que él intercedió por mí ante el resto de los directores. Estoy agradecido”. El delantero de Antofagasta pagará en 13 cuotas lo que adeuda.