Justo Villar no olvida la estrella 30 que consiguió con Colo Colo. El exarquero paraguayo en conversación con DaleAlbo recuerda como los hinchas evitaban mencionar el número prohibido.
“Había un dicho que era la 29+1, la que estaba esquiva, ya ni siquiera la nombraban. Era una carga, un desafío.Esteban (Paredes), Julio (Barroso), Jaime (Valdés) eran jugadores importantes, de peso, que tenían experiencias en estas situaciones”, dice sobre los refuerzos que formaron una columna vertebral con él.
“El primer partido contra Audax, mostraba un poco lo que podía ser, que no se iba a entregar, que en casa libamos a ser fuertes, teníamos un objetivo común. Mucho influyó que el Tito (Tapia)y (Miguel)Riffo, fuera gente que había pasado hace poco en el club”, añade.
Además no olvida que ese 13 de abril de 2014 ante Santiago Wanderers, pasó lo del incendio en Valparaíso: “La base comenzaba en el vestuario con Tito y las ganas nuestras de salir campeón, coronado con ese día, que fue muy feliz. Sin embargo,preocupado y acongojado, por lo que había pasado en Valparaíso”.
“Hace poco miraba recortes de diario, me encontraba levantando la copa. Lo tengo muy presente(..) fue especial, había pasado casi un año desde que vine al club, todo lo que conllevaba el tema de que Colo Colo no salía campeón. Había mucha carga emocional por lograr algo que era esquivo hace bastantes años”, concluye.