El regreso de Jorge Valdivia a Colo Colo marca un verdadero hito para los hinchas albos, ya que se reencontrará en el Cacique con Matías Fernández, con quien armó una dupla de ensueño en el mediocampo durante la primera etapa del equipo de Claudio Borghi en el 2006, ganando el primero de cuatro títulos consecutivos para los albos.
Tal vez la mejor expresión futbolística de ambos con la camiseta alba se dio cuando compartieron el mediocampo, donde brillaron entregando tardes maravillosas con la pelota en sus pies. Que ambos se volvieran a ver en Colo Colo era algo que muchos soñaban desde hace tiempo.
El efecto de la vuelta del Mago en Matías fue inmediato, ya que al 14 de los blancos se le vio feliz en la primera práctica que tuvieron juntos en el Monumental. Es más, se menciona que después de mucho tiempo Fernández mostró una sonrisa en su rostro.
Lo curioso es que en esta jornada Valdivia solo pudo realizar algunos trabajos físicos, sin todavía tocar la pelota, ya que debe ponerse a punto primero para estar completamente a disposición de Gustavo Quinteros. Matías, a lo lejos, simplemente se reía al verlo de regreso.
Habrá que ver si este retorno hace recordar lo mejor de ambos con la camiseta de Colo Colo, donde fácilmente podríamos hablar de tener dos refuerzos más para esta lucha por no descender, ya que Matías solo ha mostrado algunos pasajes de buen fútbol desde su vuelta al Cacique a comienzos de año.
Matías se reencontró con la felicidad a ver de vuelta al Mago. | Foto: Archivo.
El mismo Claudio Borghi opinó sobre ver a Matigol con el Mago jugando juntos, afirmando que“evidentemente con ellos hay que tener mucho apoyo en el mediocampo. En algún tiempo lo hicieron y lo hicieron bien. Pero claro, han pasado bastantes años. Yo creo que va a depender de las necesidades que tenga el equipo y del resultado”.
Jorge Valdivia no podrá ver acción ante Huachipato este sábado, pero se está trabajo en poder tenerlo listo para el crucial duelo ante Deportes La Serena del próximo martes 8 de diciembre en el Monumental. Al parecer Matías ya está impaciente para jugar con él.
