No cabe duda de que el regreso de Jorge Valdivia a Colo Colo alimenta las ilusiones de los hinchas albos en esta angustiante lucha por no descender. El Mago llega como un salvador al Monumental, como ese jugador que permitirá dar ese salto de calidad que tanta falta hace en el equipo de Gustavo Quinteros.

Hay otro ingrediente que alimenta los ánimos de sueños entre la fanaticada colocolina con esta vuelta del volante creativo, y es que Jorge se reencontrará en el Cacique con Matías Fernández, con quien armó una dupla de ensueño en el mediocampo durante la primera etapa del Colo Colo de Claudio Borghi en el 2006, ganando el primero de cuatro títulos consecutivos para los albos.

Durante esa primera mitad del 2006 el 10 y el 14 fueron vitales para el armado futbolístico en el equipo del Bichi, formando un tridente letal con Humberto Suazo, quien antes de la llegada de Alexis Sánchez en el equipo era el único delantero neto en ese Apertura.

Ambos jugadores dijeron presente en la mayoría de los encuentros de ese torneo, con Matías Fernández jugando 23 partidos (14 goles), mientras que Jorge Valdivia jugó 19 (4 goles y 18 asistencias).

La última vez que Matías y Jorge coincidieron con la camiseta de Colo Colo fue el 2 de julio de 2006, día en que los albos vencieron vía lanzamientos penales a Universidad de Chile para consagrarse campeón del Apertura. Ese día en el equipo de Borghi dijeron presente Claudio Bravo; David Henríquez, Luis Mena, Andrés González; Alvaro Ormeño (85', Miguel Aceval), Rodrigo Meléndez (46', Moisés Villarroel), Arturo Sanhueza, Gonzalo Fierro; Matías Fernández, Jorge Valdivia; y Humberto Suazo.

 

Una dupla que nos invita a soñar en este amargo 2020. | Foto: Archivo.

Una dupla que nos invita a soñar en este amargo 2020. | Foto: Archivo.

Tras ese duelo Valdivia retomaría su aventura en el extranjero partiendo al Palmerias (había jugado antes en Rayo Vayecano de España y en el Servette de Suiza), mientras que Matías se quedaría seis meses más para romperla con todo. La vuelta se dio para ambos, pero sin coincidir en un principio, con el Mago volviendo a mediados del 2017 y Matías en el inicio del 2020, con el 10 marchándose poco antes a México.

Ahora vuelven a coincidir, en un escenario poco ideal, donde la meta clara es salvar al equipo del descenso. Tal vez los números de ambos no vienen siendo los mejores, pero sin duda que su reencuentro alimentan ilusiones para pensar en que se puede ser un poco mejor. Por acá elegimos creer en esta pasada.