En la antesala del partido contra Antofagasta, escribo esto con el mero objetivo de desahogarme como un hincha de la institución que me lo ha dado todo, desde las alegrías más lindas, hasta los peores llantos, sea por pena, rabia, angustia o cualquier sentimiento que haya tenido durante estos últimos meses principalmente.

Este puede ser un partido bisagra, como coloquialmente se le conoce a un partido que puede cambiar el rumbo de un equipo, jugamos un partido que se suspendió el 26 de Septiembre de este año por un Covid positivo en el equipo, se puede decir lo que quiera, que la dirigencia nefasta que tenemos tuvo toda la culpa de este papelón de nuestra institución, que no queríamos jugar, etc., pero la verdad es que la ANFP suspendió este partido, y por reglamento no nos pueden perjudicar por más ganas que tengan de ver al más grande por los suelos.

Desde que asumió Gustavo Quintero se ha podido apreciar una leve mejora en el equipo, pero falta ese último toque que nos de los tres puntos que tanto necesitamos, y esperamos de corazón que este partido nos traiga una alegría que no tenemos desde el 07de marzo a nivel local.

Como hinchas nos aburrimos de las escusas baratas de que en la pandemia no pudimos entrenar y que el físico no nos acompaña, tuvieron dos semanas sin fútbol para ponerse a punto desde el aspecto físico y trabajar las diferentes tácticas que al Profe le parezcan correctas para afrontar los desafíos que tenemos, y sí, esta segunda rueda es una Final del Mundial, solo que es de largo aliento.

No tengo la menor idea si es preferible un 4-3-3 o un 4-4-2, porque mi opinión nunca influirá en la mente de una persona que estudió para estar donde esta, pero como hincha sé que no podemos estar en el lugar en el que actualmente nos encontramos, somos el club más grande de Chile y de una vez por todas los jugadores y todas las personas que forman parte de Colo-Colo deben entender lo que significa este club para nosotros.

Solo queda esperar a que sean las 11:00 am, un horario nefasto para muchos, pero como siempre ha sido a lo largo de nuestra larga historia, nunca jugarás solo. ¡Vamos Cacique!