Este miércoles, Gustavo Quinteros tendrá su cuarto partido como director técnico de Colo Colo, ya que tendrá que visitar a Everton en el Estadio Sausalito. Es un duelo trascendental para comenzar a recortar distancia con uno de los equipos que está en la parte baja de la tabla.

El entrenador reconoció en diálogo con Al Aire Libre de Cooperativa, que tiene un complicado escenario que mejorar, especialmente por los problemas físicos que aquejan a gran parte del plantel y que no le han permitido parar a sus mejores hombres.

“Cuando acepté este reto fue un desafío que yo sabía iba a ser complicado y no sólo por la parte futbolística, sino por lo anímico y la posición en la tabla que influye mucho”, comenzó explicando.

“Cuando uno llega y se toma objetivos, es porque cree que podemos tener a todos los jugadores desde el inicio. Pero me encontré con cosas que no tenía muy en cuenta como el montón de jugadores recuperándose de lesiones o los que se lesionaron en estos partidos. Se complicó un poco más de lo que esperaba, entonces lo que me pongo como objetivo principal es el trabajar con lo que tengo, mejorar la parte defensiva, jugar mejor”, agregó.

En ese sentido, reconoció que la eliminación por Copa Libertadores “fue un golpe duro”, pero mostró su optimismo en la mejoría física del plantel tras haber tenido una semana completa de trabajos.

“Avanzar en la copa era un objetivo y creí que íbamos a jugar mejor. Fue un golpe para todos, pero hay atenuantes a tomar en cuenta Si todo sigue como hasta ahora quizás podré repetir el mismo equipo, eso es importante porque aún no me ha pasado, he tenido que cambiar la línea defensiva en todos los partidos con muy pocos entrenamientos”, complementó.

La eliminación ante Jorge Wilstermann fue un golpe duro para Gustavo Quinteros.

La eliminación ante Jorge Wilstermann fue un golpe duro para Gustavo Quinteros.

Objetivos en el corto plazo

A pesar de la crisis, Gustavo Quinteros se plantea objetivos ambiciosos. Sin ir más lejos, el día de su presentación lanzó sin tapujos que espera meter a Colo Colo entre los siete primeros de la tabla y aún sostiene esa idea.

“Lo mantengo, hay que ponerse objetivos en el día a día, jugar mejor semana a semana es uno de los pequeños objetivos que tenemos. Después nos ponemos uno que sea posible y que nos exija. Es difícil soñar estar dentro de los primeros siete, pero es posible. Es un objetivo que nos va a permitir esforzarnos, pensar que cada día podemos luchar hasta fines de enero y sacar un montón de puntos. Hay que pensar más allá para poder crecer”, profundizó.

 

 

Finalmente, manifestó que una de sus metas en el corto plazo, es también levantar el ánimo de un plantel que sólo ha cosechado decepciones este año.

“Nos habría favorecido muchísimo ganar en la copa por el tema anímico, a veces necesitas el resultado para darle un poco más de alegría a jugadores que vienen golpeados hace mucho tiempo. Soy sincero, me encantaría poder jugar bien y ganar, pero lo que tratamos de hacer es convencer a los jugadores de estar mejor físicamente, que el resultado después va a llegar. Esperemos que sea pronto y así levantar el ánimo”, cerró.