Un hecho insólito vivió Arturo Vidal en las últimas semanas producto de una venta desafortunada de una propiedad en Italia de sus años jugando en la Juventus. El Rey Arturo, sin saberlo, se involucró con esa transacción con la Mafia Italiana.

El nombre del formado en Colo Colo apareció en medio de las investigaciones que está realizando la justicia italiana en torno ‘Ndrangheta, organización criminal con ingresos superiores a los 50 mil millones de euros anuales, esto gracias al tráfico de drogas y armas hasta la prostitución.

El protagonista en esta historia es Mario Burló, empresario que compró la primera casa en la cual vivió Arturo Vidal en su arribo a la Juventus. El millonario, que hoy está en prisión, tuvo cercanía con varios clubes italianos, entre ellos el equipo de Turín.

El tribunal de Asti citó al volante para entregue su declaración miércoles pasado, pero el Inter de Milán avisó que el jugador se encontraría en la Copa América con la Roja y adjuntó la citación de la federación chilena.

En lugar de Vidal el que salió a declarar fue Giuseppe Marotta, director deportivo de Inter y antes en la Juventus, quien afirmó que “le dije que su condominio había sido vendido a alguien que fue arrestado dos años después, pero Vidal no sabe nada de esa historia”.

Para fortuna del formado en Colo Colo, la investigación del caso no encuentra más conexiones que lo involucren. Sin embargo, hay algunos detalles que llaman la atención a la hora de recordar el estado en el cual fue vendida la propiedad del chileno.

Arturo Vidal estaba jugando la Copa América en medio de su llamado a declarar. | Foto: Agencia UNO.

Según se relata, la casa fue habitada por amigos y familiares de Vidal, quienes literalmente arrasaron con el inmueble. “Puertas y ventanas rotas, cocina destrozada, alarma fuera de servicio, el techo derrumbado”, señaló Giuseppe Greco, quien representó al jugador en la transacción en 2018. El volante ya no quería saber nada de nada de la famosa propiedad.

La propiedad de Arturo Vidal que fue vendida a la mafia italiana.

“Mi primera propuesta fue que la arregláramos y luego la vendiéramos, pero Arturo no quiso pagar un solo euro. Quería deshacerse del condominio. Eran unos 400 metros cuadrados en Moncalieri, pero el edificio estaba en ruinas y la piscina era ilegal”, agregó el agente.

Ahí fue donde apareció la figura de Mario Burló, quien compró la propiedad en 325 mil euros, en una verdadera ganga para Arturo Vidal. Dos años más tarde, Burló quedaría preso, en una transacción que a la largo trajo colilla para el formado en Colo Colo.