Emiliano Vecchio es uno de esos jugadores que dejó sensaciones encontradas en Colo Colo. Salió campeón siendo figura, siempre se le destacó por su gran talento, pero también vivió años muy malos en el Monumental, en donde se ganó muchas críticas por su irregularidad.
Hoy, el argentino ya está en la etapa final de su carrera. Juega en Defensores de Belgrano, en la segunda división de su país, pese a varios rumores de un posible retorno al fútbol chileno. Y fue en ese club donde vivió una particular decisión en el compromiso que jugaron ante Deportivo Morón en la jornada de este lunes.
Vecchio y sus compañeros fueron transportados en un bus escolar rumbo al recinto que albergaba el partido, el estadio Juan Pasquale, donde hace de local precisamente el Defensores de Belgrano. Pese a ser locales, no lograron llegar de la forma más cómoda a disputar el compromiso.
El partido terminó sin goles, en un resultado que no le sirvió a ninguno producto de que ambos se encuentran muy lejos de una posibilidad de ascenso. Sin embargo, fiel al buen humor que ha mostrado siempre como jugador, Vecchio se tomó para la risa la forma en la que debieron llegar al partido.
Tras el partido, Vecchio respondió a las preguntas de TyC Sports, donde se limitó a decir “qué difícil es esta categoría, ¿no?”. Tras ello aseguró que es “dificilísima, compleja, con pocos espacios, partidos duros“, demostrando que su paso por el ascenso no ha sido nada fácil.
“Hemos ido a jugar a Agropecuario y nos pasaron muchas cosas. Llovía y la banca no tenía techo, no tenía nada. Nos morimos de frío, nos mojamos“, relató a la tv argentina en medio de las risas. Pese a ello, el presente de Vecchio ha sido positivo, sumando 20 partidos en la temporada.
Ex Colo Colo: ¿Vecchio vuelve a Chile?
Vecchio, hace unas semanas, eso sí, había recalcado su disposición de ayudar a Unión Española en su lucha por no descender. “He hablado un poco la situación con don Jorge (Segovia). A Sabino (Aguad) lo conozco desde que me llevó a Bolivar. Les expresé que estoy a disposición“, señaló a ESPN.
“Le tengo muchísimo cariño al club, a mí siempre me han movido los desafíos y yo creo que, viéndolo de afuera, es un momento muy complejo. Cuando pasan estas situaciones, ponerse la camiseta no es fácil. Yo sé que, si me pongo la de Unión, no tendría inconvenientes en llevar esa presión”, agregó. Sin embargo, desde el propio club le cerraron las puertas al volante de 36 años.
Vale recordar que el argentino, en su paso por Colo Colo, jugó 114 partidos en tres años. Anotó 22 goles y entregó 19 asistencias, además levantó dos títulos de Primera División con el Cacique, en el Clausura 2014 y Apertura 2015, de la mano de Héctor Tapia y José Luis Sierra respectivamente.
