Claudio Bravo ingresó tras el entretiempo en el encuentro que el Manchester City igualó 1-1 como visitante ante el Atalanta en el Estadio San Siro por la cuarta jornada del Grupo C de la UEFA Champions League. 

 

Bravo recibió un gol, en el cual no tuvo responsabilidad y a los 80' fue expulsado, por una supuesta falta ante Josip Ilicic. El arbitro lo interpretó como último recurso, en las repeticiones se puede ver como el arquero no toca al atacante, pero los jueces encargados del VAR lo desestimaron. 

Bravo mostró su disgusto a través de Twitter, pero luego borró la publicación: “En ningún momento hago falta, ni menos tengo la intención de golpear al rival. Él golpea mi cabeza con su pie, Muy rigurosa la tarjeta roja. Gracias VAR”.

Después Bravo reaccionó a dichos de Arsène Wenger, quien consideró que no era expulsión, ni falta, por lo que Ilicic merecía amarilla.