Colo Colo tuvo que sudar la gota gorda y exigirse al máximo para poder vencer a Deportes Melipilla, rival que vendió cara la derrota al Monumental y al que apenas se pudo superar gracias a un agónico gol de penal de Emiliano Amor cuando el partido ya se iba.

Uno de los momentos claves del encuentro fue cuando a los 81’ Bruno Gutiérrez fue al sacrificio y bajó a la entrada del área a Cristián Zavala, delantero de los Potros que se iba en solitario hacia el arco defendido por Omar Carabali y que tenía todo a favor para abrir la cuenta para su equipo.

El juvenil del Cacique entendió que, o bajaba como fuese al atacante rival, o el 1-0 en contra era una realidad quedando apenas 10 minutos de juego. Decidió sabiamente y se sacrificó por el equipo con tal de mantener un poco más altas las opciones de terminar ganando el compromiso.

Esta acción hizo recordar rápidamente a los hinchas de Colo Colo a lo que hizo Luis Mena en el Superclásico ante Universidad de Chile del 5 de octubre del 2008, correspondiente a la fecha 15 del Clausura de ese año.

Cuando el Cacique estaba ganando por 1-0 en el marcador y con la U acercándose al empate, el multicampeón se sacrificó por el equipo a los 60’ cuando Raúl Estévez se iba solo al arco defendido por Cristián Muñoz, bajándolo a la entrada del área y eligiendo la roja por sobre el gol en contra.

Al igual que ayer con el tiro libre posterior de Zavala, el disparo de Walter Montillo no terminaría en gol, manteniendo el marcador tal y como estaba antes de la falta. El sacrificio de Mena ganaría valor a los 75’ cuando Lucas Barrios anotó el 2-0 definitivo tras un recordado carrerón en campo propio.

Tal y como hace 13 años en el Monumental, la expulsión de Bruno se tradujo en la victoria del Cacique gracias al penal de Emiliano Amor en tiempo adicional. Había que ganar como sea y así lo entendió el juvenil albo, igual que Luis Mena en uno de los triunfos en el Superclásico que más tiene guardado en la memoria el hincha de Colo Colo.