Hace algún tiempo Pablo Solari dejó la grande al instalar la posibilidad de nacionalizarse como chileno para jugar en la Roja, siguiendo los pasos de Ben Brereton, quien siendo inglés optó por defender al equipo de todos en una decisión que literalmente cambió por completo su vida.
“Admiro mucho su adaptación (Ben Brereton), es difícil venir de Europa sin conocer el país, conocer a los compañeros. Se adaptó rápido y es difícil adaptarse rápido a una situación así. Sería lindo jugar con Alexis y Ben”, afirmó el propio Solari el pasado 4 de febrero charla con DirecTV.
¿Pero se vería él mismo tomando una decisión así? Sorprendentemente el nacido en argentino no rechazó para nada la idea, afirmando que “sí, lo pensaría, lo hablaría con mi familia y se tomaría una decisión. No lo descartaría, pero si lo evaluaría. Tampoco te voy a decir sí ahora inmediatamente”.
Pues bien, mucha agua ha pasado bajo el puente desde estas palabras del Pibe, sobre todo a nivel legislativo en el congreso, esto luego de que la Comisión de Deportes de la Cámara de Diputados rechazara la indicación que impedía que los futbolistas profesionales se acogieran a la iniciativa de agilizar los procesos de nacionalización para deportistas de alto rendimiento.
Para entender esto bien hay que retroceder un poco en el tiempo, cuando en el 2018 el ex diputado y atleta Sebastián Keitel ingresó un proyecto para reducir de cinco a dos los años de residencia exigidos para optar por la nacionalidad chilena, siempre y cuando se tratase de deportistas de elite validados por la autoridades en su materia y que quieran representar a nuestro país en competencias internacionales.
Sin embargo, un punto impedía que en ese lote se encontraran los deportistas con contrato profesional. Pepe Auth, ex diputado, argumentó esto en charla con RedGol al señalar que “la intención era justamente dejar afuera el fútbol, porque la nacionalización 'express' de extranjeros jóvenes puede ser un fuerte desincentivo a la formación, ya que saldrá más barato nacionalizar jóvenes argentinos”.
“¿Jugar en la selección chilena? Lo pensaría, lo hablaría con mi familia y se tomaría una decisión. No lo descartaría, pero si lo evaluaría”
- Pablo Solari en febrero del 2022.
¿Y en qué afecta esto a Solari? En que en noviembre del 2022 cumple dos años de residencia en Chile, y al estar inscrito en una federación de alcance mundial, puede por los plazos perfectamente nacionalizarse chileno.
Una vez hecho este trámite queda esperar el veredicto de la FIFA, ya que el Pibe podría emigrar de Colo Colo al extranjero por un traspaso, pero con su residencia en Chile, lo que debe ser demostrado con visitas esporádicas. Si todo marcha bien, podría jugar por la Roja en el 2025 con 25 años.
Ahora queda esperar cuál será la decisión final del jugador tras una que otra charla con su entorno más íntimo. El Pibe representó a Argentina en el tradicional torneo juvenil de L'Alcudia en categoría Sub18, pero después de eso nunca más volvió a ser considerado al otro lado de la cordillera. ¿Le seguirá tentando la opción de jugar con Alexis y compañía?
