Brayan Cortés: No fue mayormente requerido salvo un par de remates de media distancia que controló bien. Algo dubitativo en un balón aéreo de una detenida que cayó en el segundo tiempo pero se resolvió bien. Desahogó con los pies cuando fue necesario.

Óscar Opazo: Tuvo un cierre portentoso a Arismendi en el primer tiempo. Si bien no se proyectó con el peligro que generalmente produce en ofensiva, cumplió su faceta de marcador de punta de manera correcta.

Matías Zaldivia: Fiero para marcar a un tridente peligroso de Everton. Pierna fuerte, correcta salida, buen anticipo.

Juan Manuel Insaurralde: Al igual que Zaldivia, estuvo generalmente bien parado. La única gran zozobra la pasaron cuando se fue Cerato mano a mano pero llegó De La Fuente a cerrar.

Ronald de la Fuente: Gran cierre para molestar a Cerato en la jugada del mano a mano con Cortés. Si bien falló en una salida, intentó siempre ser aporte por la banda, aunque a veces careció de mayor precisión y no fue tan “dañino”.

Carlo Villanueva: Ausente durante el primer tiempo, le costó conectar. En el complemento apareció en una y provocó la más profunda hasta ahí. Debe encontrar mayor regularidad, sobre todo en estos partidos de defensas cerradas.

Carlos Carmona: Sumó otro partido correcto y esa es la gran gracia de su puesto, que el 6 no sea tema. Además, es positivo porque añade “kilometraje” futbolístico tras mucho tiempo parado. Tuvo un gran cierre tras un “zapallazo” que cayó en el segundo tiempo.

Gabriel Suazo: Fue el que más intentó en ofensiva desde el mediocampo. A veces con más o menos fortuna. Nunca deja dudas de que entrega todo.

Iván Morales: Tuvo la más clara para Colo Colo en el primer tiempo pero falló al intentar acomodar un balón que venía incómodo. No pudo imponer su potencia en ofensiva pese a que tuvo algunas insinuaciones.

Javier Parraguez: Poco participativo en el primer tiempo. Tampoco le llegaron muchos balones, pero no generó jugadas de peligro por su cuenta hasta que conectó un par de cabezazos peligrosos en el segundo tiempo, pero que no tuvieron la precisión adecuada.

Gabriel Costa: Impreciso, le costó profundizar y dañar por su costado o buscar alguna otra variante para abrir la defensa de Everton.

 

(63’) Pablo Mouche: Buscó siempre el mano a mano, ganó línea de fondo, pero la faltó la precisión que lo caracteriza para dañar. Esto último, seguramente, por el tiempo sin fútbol tras la lesión. Buena noticia tenerlo de vuelta. Que agarre ritmo.

(77’) Jaime Valdés: Si bien estuvo impreciso en algunas, también fue el autor del pase profundo más peligroso del partido, el que encontró a Javier Parraguez solo y estrelló de cabeza en el travesaño. Con partidos “gastados”, puede aportar todavía desde el banco.

(82’) Andrés Vilches: Tuvo una clarísima en los descuentos que le hubiera dado no sólo grandes tres puntos a Colo Colo, sino que un gran envión anímico. No se dio.

 

DT Mario Salas: Hizo lo lógico con el equipo inicial. Quizás debió buscar antes con alguna variante como Jaime Valdés por Villanueva o no sacar a Morales, sino a Costa para dar ingreso a Mouche. Buen cometido en defensa, pero poca agresividad y claridad en el último cuarto, que es donde se ganan los partidos. Es claro que Colo Colo está en un periodo de transición hacia lo que será su “real” proyecto en 2020 donde, seguramente, habrá una renovación de plantel, pero también se necesitan puntos para entrar en Copa Libertadores la otra temporada, el piso como objetivo para este 2019.