No hay dudas de que el Covid-19 cambió la vida de todo el mundo. Cuarentenas, encierros, mascarillas y distanciamiento físico son algunas de los aspectos que tuvimos que internalizar en nuestro diario vivir.

Los cuidados tuvieron que extremarse, sobre todo, en aquellas personas que sufrían de algunas patologías anteriores. Es el caso, por ejemplo, de Roberto Rojas. El Cóndor sufrió de fallas hepáticas y, por lo mismo, tuvo que ser trasplantado de hígado en el año 2015. Además, ese mismo año, sufrió un derrame y tuvieron que extirparle parte del pulmón derecho.

La dura vida de Roberto Rojas por temor al Covid

Claramente, la situación médica del ex arquero de Colo Colo es de sumo cuidado y, cualquier enfermedad grave, puede empeorar su salud. Eso lo sabe el Cóndor y, por lo mismo, ha reforzado las protecciones desde que se instauró la pandemia en Brasil, lugar donde tiene su residencia junto a Viviane, su señora.

En diálogo con LUN, el ex portero junto a su compañera, contaron el modo de vida que tienen desde principios del año 2020. Por culpa de la enfermedad que todavía tiene al mundo en ascuas, Rojas no ha podido ver a sus hijos ni nietos desde aquel entonces y ya son tres los años los que ha vivido encerrado en su casa en Sao Paulo.

Las únicas veces que he salido fueron para ir a una consulta y las cinco veces que me vacuné. Ni mis hijos ni mis nietos pueden venir a mi casa, no los veo desde que apareció la pandemia y dieron la alarma de que había que protegerse, en febrero de 2020. Antes tampoco salía mucho, por eso no tuve problemas de quedarme en casa, porque me gusta”, explicó el ex guardameta.

Además, contó que su “hija está embarazada y no puedo darle un abrazo, es complicado. Aunque siempre los veo cuando hablamos por Whatsapp, no es lo mismo. Pero bueno, es lo que tenemos ahora”.

Es que, si bien las ganas de hacer una vida más normal están, el otrora crack de la Roja sabe que su situación es de cuidado. “Claro que uno quiere ir al shopping, al estadio, a juntarse con amigos, con la familia, ir a Chile para ver a mis hermanos, pero lamentablemente no puedo no más, qué le voy a hacer. Luché tanto por vivir, tanto que luché por mejorar mi salud y no lo puedes echar a perder en un minuto. Ellos entienden, no hay problema”.

Roberto Rojas y Diego Maradona en la Copa América de 1989 | Imagen: archivo

Roberto Rojas y Diego Maradona en la Copa América de 1989 | Imagen: archivo

Su vida con Viviane Bruno

Viviane, su mujer, no dudó en acompañar en su decisión a Roberto Rojas. Ella tampoco ha salido de casa hace tres años debido al temor que le causa contagiar a su marido. Por lo mismo, buscan estrategias para llevar de buena forma su vida.

“Estamos tranquilos, ella hace la mitad de las cosas y yo la otra mitad, conversamos de todo. Estamos bien, aunque a veces uno discute porque despertó atravesado, es parte de esto”, señaló Rojas. Por último, Viviane agregó que tienen “un jardín de fondo y otro al frente, tenemos muchas plantas y flores y Roberto es un tremendo jardinero. Poda todas las flores, como las orquídeas, porque como yo soy decoradora de interiores, hice el jardín de la casa con un proyecto súper bonito”.