La figura de Jaime Pizarro en Colo Colo se ha distorsionado para los hinchas en los últimos años, sobre todo por su discreto paso por el Monumental como Gerente Deportivo entre 2011 y 2012 y como director de Blanco y Negro por el bloque de Leonidas Vial.

Lamentablemente esos tropiezos al interior del Cacique han jugado en contra para lo que significa el Káiser en la inmensa historia alba, jugando 452 partidos entre 1982 y 1994, siendo el capitán del equipo campeón de la Copa Libertadores 1991 y el entrenador del torneo logrado en la quiebra del club en el Clausura 2002.

Luis Ignacio Quinteros fue parte importante del equipo en ese campeonato logrado con la institución en quiebra y por lo mismo hizo un llamado a la hinchada alba a respetar la figura de Pizarro al interior de Colo Colo y se debe separa le hecho como jugador y entrenador a lo que vino después.

“Las cosas no se pueden confundir, esto a cualquiera que haya sido figura tan importante. Jaime ganó la Copa Libertadores siendo el capitán, un jugador importantísimo, elegido el mejor seis del mundo en su momento”, afirmó Nacho en conversación con DaleAlbo.

En ese sentido agregó que “de repente tú dices que se manche lo que hizo el por temas que están vinculados a Colo Colo. Lo que él fue como jugador no se puede manchar. Las cosas hay que separarlas y lo que marcó Jaime Pizarro no se puede ensuciar. No solo Jaime, sino cualquier jugador que haya sido importante y esté trabajando en otras cosas, no se puede manchar”.

Para finalizar comparó esta situación con Marcelo Espina, quien actualmente es el gerente deportivo de Blanco y Negro. “Es como que se puede criticar a Marcelo Espina. Eso es otra cosa, pero lo que él como fue como jugador no se puede manchar. Capitán de Colo Colo, figura en las Copa Libertadores, no digo intocable, pero no se pueden mezclar las cosas”, concluyó Quinteros.

Jaime Pizarro jugó 452 partidos en la camiseta de Colo Colo, donde ganó seis Campeonatos Nacionales, cinco Copa Chile, una Copa Libertadores, una Recopa y una Copa Interamericana. Como entrenador ganó el Clausura 2002 con el Cacique en medio de la quiebra institucional.