En Rodelindo Román han aprovechado de rescatar a futbolistas que cometieron errores en el pasado y que estaban cerca del retiro, reencantándolos con el fútbol y algunos han podido partir a clubes más fuertes. Uno de estos casos es el del delantero Roberto Riveros, ex promesa de Colo Colo que incluso llegó a ser sparring de Jorge Sampaoli en la Roja.

Tras varios años de incertidumbres, encontró un segundo aire en el club que administra Arturo Vidal. Rodolfo Madrid contó cómo fue el trabajo que recuperó al atacante de 24 años, quien tras una vuelta larga, pudo fichar en Cobreloa.

“Lo recibimos en el año 2018, había ido a Santa Cruz antes de estar con nosotros. Debutó en el primer equipo de Colo Colo, pero siempre estaban como que lo querían o no lo querían. Siempre era el último juvenil que quedaba, entonces no se equipaba”, contó el técnico del Rode a DaleAlbo.

Cuenta que “llevaba seis meses yendo a entrenar a Colo Colo, a veces entrenaba hasta con la juvenil, porque no tenía equipo donde jugar. Si no iba no pasaba nada, estaba cumpliendo con su contrato a medias Así estuvo seis meses en Colo Colo, sólo entrenando”.

Madrid sabía de sus condiciones, ya que fue uno de sus entrenadores en las categorías menores albas y por eso apostó por él. “Lo conocíamos, había estado hasta de sparring con Sampaoli, en cadetes siempre fue un jugador muy destacado, tiene cosas muy parecidas a las definiciones que tenía Manuel Neira. A nosotros nos llamaba la atención y en lo personal me gustaba mucho”, profundizó.

Para ir a Rodelindo Román, Riveros tuvo que pedir su pase a Colo Colo. “Cuando nos enteramos de que podía ir, Pablo Contreras se encargó de hacer todo el tema administrativo, porque jugadores de primera no podían ir a préstamo, entonces tuvo que finiquitar”, explicó.

El ex lateral contó que hicieron para que el delantero se motivara de nuevo con el fútbol, al punto que de dar un paso importante en su carrera al firmar contrato con Cobreloa.

“Hubo que hacer todo un trabajo. de convencerlo de ir a jugar a tercera. De que se pusiera las pilas, de que se reencantara, lo hizo de muy buena manera y fue elegido el mejor jugador de la tercera. Se fue a Colchagua en segunda profesional con Francisco Arrué. Hizo muy buen año, el Pancho le metió más presión, lo bajó de peso, se puso en buena forma,  y por eso viene el paso de fichar en Cobreloa, un desafío más importante de pelear un puesto en Primera B en un club mucha historia", completó.