Hace exactamente diez años, Colo Colo levantaba su estrella 29 de la mano de Ezequiel Miralles, Macnelly Torres, pero sobre todo del goleador de aquella jornada, Esteban Paredes, quién se matriculó con un doblete para sepultar las aspitaciones de la Universidad Católica.

La final se jugó en el Estadio Santa Laura y los cruzados, dirigidos en ese entonces por Marco Antonio Figueroa, tenían la primera opción tras haber igualado a dos en la ida en el Monumental.

La tarea se puso más complicada para el Cacique, porque a los 15 segundos ya estaban en desventaja con anotación de Rodrigo Valenzuela. Sin embargo, los albos no bajaron los brazos y se vieron superiores a pesar del marcador, encontrando premio en la igualdad por un cabezazo de Charles Aránguiz.

Posteriormente vendría la mejor conquista de la jornada. Esteban Paredes giró para dejar en el camino a un marcador y después le haría un túnel a Hans Martínez para quedar mano a mano contra Paulo Garcés y no perdonó.

En el segundo tiempo la UC salió con todo y logró el empate vía Roberto Gutiérrez, pero la alegría no les duró mucho, porque dos minutos después Paredes conectó de cabeza un preciso corner de Macnelly Torres, desatando la algarabía en la hinchada colocolina que celebraba con su goleador colgado en la reja.

Cuando los cruzados ya estaban entregados, Millar recuperó una pelota al medio, se la pasa a Miralles quién de primera asistió a Cristián Bogado para poner un 4 a 2 categórico que coronó un sufrido semestre para Colo Colo, que en por momentos coqueteó con la zona de descenso.

Fue la primera corona de Paredes en el club de sus amores, pero posteriormente le tocó vivir las penurias de un Colo Colo que dio lástima y que esperó hasta el 2014 para volver a gritar campeón.