El triunfo ante Antofagasta no solo fue el cierre de una de las rachas más negativas en la historia de Colo Colo también marcó la primera victoria de Gustavo Quinteros como entrenador. Cinco derrotas consecutivas como local antecedían a este partido y un lejano 7 de marzo registraba la última victoria en el campeonato.

Por este motivo, el Cacique salió con todo y quiso imponer sus términos desde el primer minuto. Presión alta, buen trato de balón y llegadas directas a la portería de Ignacio González, quien se transformó en una de las figuras, fueron la tónica del partido.

Gabriel Suazo, Juan Manuel Insaurralde, Gabriel Costa y Esteban Paredes intentaron abrir el marcador pero se encontraron con el portero o el balón se desvió por centímetros del arco rival. Quinteros movió las piezas y justamente desde la banca aparecieron las llaves para romper el cerrojo puma.  Javier Parraguez habilitó a Iván Morales quien con un toque suave empujo el balón a la portería cuando se jugaba el último minuto del partido.

El gol de Iván Morales fue una expresión de júbilo no solo en el césped del Monumental, también en miles de hogares e inclusive oficinas debido al del horario del partido. Pero el festejo que se llevó todas las miradas se produjo en la boca del túnel donde el utilero, Roberto Contreras, más conocido como Nahuel, explotó en emoción tras la conquista del Cacique.

Nahuel lleva años trabajando en el Monumental: comenzó haciendo el aseo, fue utilero del fútbol joven para luego transformarse en uno de los utileros del primer equipo. 

“Fue con el alma. Estoy feliz pero mañana hay que levantarse temprano y seguir laburando”, confesó en una conversación publicada en el Instagram del libro Relatos Populares.

El vídeo de Contreras se convirtió en viral y los hinchas se sintieron identificados con el festejo del querido utilero.

¡Vamos Nahuel! ¡Que vengan más festejos!