La década de los 90, sin duda, fue marcada por grandes jugadores que pasaron por el fútbol chileno. Colo Colo también fue testigo de nombres ilustres que formaron parte de la historia, como Marco Antonio Etcheverry. El Diablo fue puntal para el título conseguido en 1993, pese a que disputó pocos partidos antes de una grave lesión.
Sin embargo, volvió a jugar en 1994 como también en 1995, tiempo suficiente para que una de las glorias del fútbol boliviano se enamorara del Cacique. Quien alcanzara a disputar el Mundial de Estados Unidos con su selección, como también varias Copa América, dejó una huella en el Estadio Monumental imposible de borrar.

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El Diablo Etcheverry sigue enamorado de Colo Colo
El Cacique sigue formando parte del corazón del Diablo Etcheverry, un cariño que sigue presente hasta el día de hoy. En conversación con Felipe Bianchi, para el Podcast Centenario, el histórico jugador de Bolivia grafica de esta manera el cariño por los hinchas albos.

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“Para mí, Colo Colo me hace vivir. Honestamente. No es por vender humo, es parte de mi vida”, señaló en la charla con el periodista. De hecho, agrega que ese cariño lo sintió en todo momento, incluso en los más difíciles, con un regalo que atesora hasta nuestros días.
“Desde mi debut hasta un regalo que me hizo la barra durante mi lesión. Fue un cuadro desde el tobillo a la rodilla, con el mapa de Chile. Eso lo tengo guardado hasta ahora, después de 30 años”, agregó el Diablo.

En ese sentido, el amor que siente por la camiseta del Cacique lo grabó a fuego en su pecho. “No sólo es parte de mi vida futbolística, es de mi vida personal por el cariño del hincha chileno y de Colo Colo”, complementó.
Además, reveló que su gran deseo en el corto plazo es volver al Estadio Monumental y recorrer los lugares que alguna vez hizo como jugador, para entrar en la vida de las nuevas generaciones de colocolinos. “Quiero volver a Chile, ir al estadio, ver al equipo, entrar al vestuario si se puede para saludar a jugadores y al técnico. Caminar hasta las canchas de entrenamiento, debe ser parecido a como era antes. Quiero conocer los vestuarios, que deben estar cambiados, el complejo, el estadio. Era único Colo Colo”, relató.
El paso de Marco Antonio Etcheverry en el Estadio Monumental
El Diablo Etcheverry llegaría a Colo Colo en 1993, donde disputaría 33 partidos con ocho goles, siendo clave para obtener el título del Campeonato Nacional de ese año, además de conformar el Equipo Ideal de América, como la Copa Chile de 1994.
Además, también disputaría ese año el Mundial en Estados Unidos donde solo jugó un partido tras ser expulsado en el debut ante Alemania en Chicago. Tras un breve paso por América de Cali en 1995, Etcheverry volvería a Macul donde disputó 22 partidos más, antes de partir al DC United de la naciente MLS.