Colo Colo tuvo un año 2008 particularmente movedizo, con tres entrenadores en la temporada y varias “crisis” que el Cacique tuvo que saber pasar para terminar con el premio de campeón del Clausura. Tal vez el primer inconveniente fue la salida de Claudio Borghi, quien en marzo sorpresivamente dejó el cargo a días de enfrentar a Boca Juniors por la Libertadores.
El Cacique, que había vencido a los Xeneizes por 2-0 en el primer duelo de la fase de grupos jugado en el Estadio Monumental, tenía claras aspiraciones de seguir avanzando fases en la cita continental, algo que se ponía cuesta arriba sin la presencia del argentino tetracampeón en la banca.
Uno que vivió de cerca ese importante hito fue Gustavo Biscayzacú, quien en charla con DaleAlbo recordó que “fueron dos partidos muy lindos, importantes para el club y para mí en lo personal. Poder convertir tres goles en dos partidos en fase de grupos de Copa Libertadores a un Boca importante, lleno de figuras, un equipo muy importante. Nosotros en el mano a mano quedamos por encima de ellos, pero después en el grupo no pudimos pasar de fase por un gol, fue una pena muy grande porque teníamos para seguir avanzando”.
“Me queda el recuerdo del Monumental lleno, de haber ganado un 2 a 0 con claridad, de poder marcar un gol, fuimos muy superiores, era para un 3 o 4 a 0 perfectamente porque fuimos muy superiores. En La Bombonera estuvimos dos veces encima en el marcador; cuando hago el primer gol, nos empatan, vuelvo a hacer el segundo, y terminamos perdiendo un partido increíble, de esos que no entiendes cómo lo pierdes y no lo pudimos ganar. Nos costó un poco la clasificación porque después ya estábamos obligados a ganarles a Atlas de local y no pudimos”, agregó.
Sobre la salida de Borghi, el Grillito sostuvo que “pegó duro en el camarín, en el grupo, porque estábamos muy alineados con su idea, con su forma de ser, cómo manejaba al grupo. Para nosotros era muy importante y él lo hacía realmente muy bien. Obviamente nos pegó, no era fácil enfrentar un partido tan importante sabiendo que tu entrenador había renunciado”.
“Son decisiones que los seres humanos toman y queda respetar nada más. Nosotros no podíamos hacer mucha cosa cuando una persona como el Bichi ya había tomado una decisión. Era muy difícil revertirla y lamentablemente se fue”, concluyó Biscayzacú.
Claudio Borghi dirigió 138 partidos en el Cacique entre 2006 y 2008, donde ganó 83 duelos, empató 27 y perdió 28, dejando en su proceso al primer equipo Tetracampeón del fútbol chileno y un equipo finalista de la Copa Sudamericana 2006.