Uno de los momentos que más marcó el paso de Jason Silva por Colo Colo fue cuando pisó y pateó un lienzo de Universidad de Chile para celebrar el triunfo en un Superclásico en el Estadio Nacional por el Clausura 2014.

En conversación con DaleAlbo, el volante del Santa Rita de Ecuador relató lo ocurrido tras ese incidente. “Ganamos el clásico, estábamos a un partido de ser campeones y cuando voy con el Quili al túnel me doy vuelta y veo que aparece un lienzo de colores, sin insignia. Me acerqué y pasó lo que pasó, pero jamás sabiendo que eso iba a tener tanta repercusión”, comenzó.

Y eso porque Silva pasó toda la noche detenido en una comisaría y contó como se dio esa detención en pleno festejo. “Estábamos celebrando, carabineros quería sacarme del camarín para llevarme. Los dirigentes se quedaron hablando de que sólo tenía que ir a firmar a la comisaría para quedarme en mi casa después. En mi casa me esperaban para celebrar el triunfo. Me dejaron detenido sin saber mucho y pasé toda la noche”, profundizó.

Silva protagonizó una de las grandes polémicas de aquel Superclásico al patear un lienzo de la U / FOTO: Agencia Uno

El jugador reveló con lujos y detalles todo lo que le dijeron en la comisaría: “yo iba con la ropa de Colo Colo, se me acerca carabineros y me dicen que pida ropa a mi casa porque podía llegar gente de la U y los podían meter conmigo. Les dije que no me podían hacer eso, era jugador que andaba con la ropa, pero bueno tuve que llamar a la casa”.

El problema vino después, ya que “ala noche llegó gente de la U por disturbios y los encerraron al lado mío. Cuando alguien entra los carabineros cuentan todo para hacerse los simpáticos, los chistosos, y les contaron que estaba un jugador de Colo Colo y todo lo que había pasado. Ahí empiezan a gritarme de todo, que me iban a matar, pero nunca pasó nada más allá de la amenaza. En algunas páginas empezaron a publicar mis direcciones, números de teléfono, pero no pasó nada más”.

Finalmente, abordó lo que fue su conversación con un molesto Arturo Salah, presidente de Blanco y Negro en ese entonces. “Estaba enojado conmigo, un poco molesto porque esas cosas no podía hacerlas, que era mala para el club y que estaban sentidos. Iba a tener que hacer algunas charlas, me hace hacer la conferencia donde me obliga a pedir disculpas públicas, pero después no pasó nada más allá”, completó.