El Caso Byron Castillo tiene en vilo a todo el medio futbolístico chileno, esto a la espera que la FIFA dé a conocer su resolución que tiene todavía en veremos a los 32 clasificados al Mundial de Qatar 2022 y la presencia de Ecuador en la próxima cita planetaria.

Sin embargo, este no es el único caso en el que la federación ecuatoriana está enredada, ya que hay otro que involucra directamente a Colo Colo y que pasó algo colado en las últimas jornadas.

Resulta que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) resolvió que Ecuador debe pagarle la importante varios cientos de miles de dólares a Gustavo Quinteros, actual estratega del Cacique, esto por dineros adeudados desde septiembre del 2017, cuando fue despedido tras caer por 1-0 ante Perú en las Eliminatorias rumbo a Rusia 2018.

El contrato decía claro en una de sus cláusulas que si una de las dos partes terminaba el vínculo antes de tiempo, se debían pagar 500 mil de la moneda americana. Ecuador no cumplió con esto, ya que argumentaron que el contrato hablaba de una prestación de servicios, no necesariamente como seleccionador.

El actual DT de Colo Colo fue a la FIFA y no tuvo buenos resultados, este porque señalaron que eran los tribunales locales de Ecuador quienes debían ver este tema. Finalmente decidió ir al TAS, donde la historia dio un giro de 180 grados.

Gustavo Quinteros dirigió 33 partidos en Ecuador, con 13 triunfos, 6 empates y 14 derrotas entre 2015 y 2017. | Foto: Agencia UNO.

Gustavo Quinteros dirigió 33 partidos en Ecuador, con 13 triunfos, 6 empates y 14 derrotas entre 2015 y 2017. | Foto: Agencia UNO.

El tribunal afirmó que la FIFA sí podía ver este tema y que Ecuador despidió a Quinteros de su cargo, por lo que debía pagar la indemnización estipulada en el contrato, aunque claro, bajando un poco la suma a 366 mil dólares.

A estos dineros hay sumarles la paga de los días trabajados en el mes del despido y los costes del juicio (que pagó Ecuador en un 90% y la FIFA en un 10%). Sacando cuentas, Quinteros recaudó más de 400 mil dólares en el proceso, en un duro golpe para la federación ecuatoriana en la antesala de que se conozca la resolución del Caso Byron Castillo.