La espera para Marco Rojas terminó. El neozelandés-chileno ya está en nuestro país para realizar los últimos trámites y convertirse en nuevo jugador de Colo Colo. El Kiwi Messi, como es apodado, dejó el Melbourne Victory y, si todo sale bien, se calzará la camiseta alba.
En su llegada a Chile, Rojas señaló que se siente “feliz de estar en el país de mi padre, es algo emocionante. Es mi tercera vez en Chile, antes vine de paseo. Espero llevar la camiseta con orgullo, es algo especial para mi familia, es una combinación de todo, mis expectativas son empezar a trabajar duro y veremos hasta dónde llega eso”.
Sobre la posibilidad de ser nuevo jugador de Colo Colo, el neozelandés mostró su felicidad, expresando que “es un orgullo para mí y mi familia, no hay palabras para expresarlo. Estoy feliz de estar aquí, todavía no hay mucho que decir, pero ojalá se arregle todo luego”, dejando en claro que todavía restan algunos detalles para su fichaje.
Marco Rojas reconoció que, por parte de su familia chilena, “son todos colocolinos, conozco mucho. No he podido ver todos los partidos por el horario, estoy al otro lado del mundo, pero conozco bastante”.
Por último, el posible nuevo jugador de Colo Colo confesó que ya conversó con Gustavo Quinteros, aunque solo “pude hablar algo rápido con él, pero hay algunas cosas que asegurar y después de eso podré hablar un poco más con él”.
De esta manera, Marco Rojas se realizará los exámenes médicos de rigor para poder arreglar los últimos detalles con Colo Colo y, así, se convierta en el segundo refuerzo del Cacique.
¡Una nueva manera de comentar y opinar!
Ahora, DaleAlbo te ofrece una nueva experiencia de interacción con el contenido. A través de Viafoura puedes registrarte y comentar con tu cuenta de Google o tu mail, además de Facebook. Tu feed de noticias mostrará las tendencias, las alertas de los temas más importantes, historias en directo y la actividad de toda la comunidad alba en vivo. Una experiencia completa, ordenada y que se amolda a tus intereses. ¡No te quedes afuera y pruébala!