El nombre de Sebastián González siempre será relacionado de alguna manera a Colo Colo. No sólo por su fuerte identificación con el club que mostró desde su etapa como futbolista, sino porque no son pocos los que tienen ganas de verlo como gerente deportivo en un futuro, un cargo para el que sigue preparándose desde el ascenso.
Pero el Chama entiende como pocos que en el Cacique nadie te espera, por lo que prefiere quemar etapas para llegar más preparado para tomar un desafío muy exigente. Así lo analizó en entrevista con DaleAlbo, donde contó cómo busca formarse en un rol que cada vez toma más prepodenderancia en el fútbol moderno.
“Por supuesto, uno cuando empieza un desafío distinto en lo profesional se va poniendo metas, uno se pone techos, pero en general soy de poder construir una carrera, partir desde abajo. Así lo hice en el fútbol que me proyectaba a llegar a Colo Colo desde cadetes y después al exterior o en los medios de comunicación que partí comentando fútbol joven en Quilín y llegué hasta comentar un clásico”, comenzó en diálogo con DaleAlbo.
Su desarrollo como gerente deportivo
Actualmente, el ex delantero es la cara visible del proyecto de Deportes Recoleta tras un buen paso por Iberia, donde ha adquirido conocimientos que asume le servirán para tomar un desafío deportivo más ambicioso. Todo esto, considerando las enormes diferencias de presupuesto e infraestructura en relación a algunos clubes de Primera.
“Empecé primero en Segunda División, aprendí el contexto, conocí la gente que rodea ese entorno y es totalmente distinto. Ahora estoy en Primera B, donde también te van conociendo, en Recoleta siento confianza plena en mi trabajo al punto de que puedo ir a los consejos de presidentes, conocer esa interna de los clubes y aprender de ello. El público que sigue el fútbol se va directo a lo del fin de semana que es lo que pasa en la cancha, pero atrás hay un trabajo constante de mucha gente que pasa desapercibida”, cuenta.
Al ser consultado si tomaría la responsabilidad de la gerencia deportiva del Cacique fue claro: “quiero seguir escalando. Este año un equipo de Primera División me ofreció trabajar con ellos, pero dije que no porque tengo que ser consciente y consecuente de lo que estoy preparando y comunico. Yo digo siempre que tratemos de seguir progresando en este cargo que cada vez es más necesario en el fútbol moderno, que se entienda por parte de los hinchas, la prensa y dirigentes que después te contratan. Siempre digo que para ser un buen gerente deportivo debes tener atrás un buen presidente, sino es muy complejo. Por eso dije que no, no podía estar cambiando de categoría de un año a otro o altiro cambiarme de club”.
En ese sentido, explicó que un gerente deportivo debe proyectarse en el tiempo con una institución y no pensar en la inmediatez, ya que sus capacidades para el cargo serán evaluadas por la huella que deje donde le toque trabajar.
“Tengo que ser consecuente de que este cargo es de mediano a largo plazo, no puedes estar yéndote al año y medio cuando tratas de hacer un camino dentro de un proyecto del club. El gerente deportivo no es el que debe llevar un proyecto, es trabajador de ese proyecto, cuando no hay proyecto cuesta mucho más, cuando no hay credibilidad en el proyecto ni hablar, te tienes que ir. Mis objetivos son claros para el futuro, pero no me ando candidateando, yo respeto a quienes están y cada equipo tiene su contexto”, cerró.
