Gustavo Benítez necesita un líder en el ataque, un 9 clásico, potente por aire y con jerarquía. ¿El problema? Un jugador de esas características es bastante caro en el fútbol moderno.
Santiago Silva fue uno de los nombres tirados a la mesa pero, definitivamente, es impagable. ¿Gustavo Canales? Sigue siendo opción pero quiere terminar su carrera en Unión Española.
Otro que desea el DT es Emmanuel Gigliotti pero interesa en Boca Juniors y Pumas de la UNAM ya lo está dando como refuerzo. Ante el mercado mexicano no hay cómo competir.
Así las cosas, otro anotado por Benítez comienza a tomar fuerza: se trata de Milton Caraglio, ex piloto de ataque de Rangers hoy en el Pescara de Italia sin continuidad. Por ahora, es a operación más “fácil” de concretar y se harán las tratativas. Además, es de gusto del adiestrador.