Colo Colo ha sido una lágrima este año y está protagonizando una de las peores campañas de toda su historia. El equipo no juega a nada, le penan la falta de variantes frescas y eso ha quedado en evidencia con el paupérrimo penúltimo lugar en la tabla de posiciones.

En contraparte, desde la vereda de la debacle alba se ve el crecimiento sin oposición de Universidad Católica, líder indiscutido del torneo y que lucha por conseguir el primer tricampeonato de su historia.

Los hinchas además se lamentan de ver que dos de las máximas figuras de los cruzados este año son dos jugadores desechados por el Cacique: César Pinares y Valber Huerta.

El primero es un valor formado en el Monumental, que decidió partir muy joven a una experiencia poco provechosa en el Chievo Verona. Destacó en Unión Española y después emigró al Medio Oriente, donde también se quedó sin sitio y de allí volvió a Macul.

Sin embargo, el zurdo nunca se afirmó como titular ni con Pablo Guede y menos con Héctor Tapia. Sólo ingresaba en los minutos finales, no se supo jamás de que jugaba (enganche o por la banda) y poco hizo para ser más considerado en un equipo que salvo su campaña en Copa Libertadores, tuvo un cometido muy irregular.

Marcelo Espina pasó la podadora en diciembre de 2018 y le comunicó a Pinares que no estaba en los planes del club. "Nunca tuve el respaldo del nuevo directorio, solo Mosa me bancó desde principio a fin. Tengo muchas sensaciones. Y la continuidad que tuve, que fueron cuatro partidos, me llevó a ser llamado a la Selección. No creo que haya estado tan equivocado el técnico de la Selección”, lanzó evidentemente molesto.

Posteriormente se fue a la UC y cada vez que enfrentó a Colo Colo hizo partidazos, con goles, asistencias y haciendo lujos. Hoy es una de las grandes figuras del torneo y se ganó una convocatoria a la selección.

 

 

El paso de Huerta fue aún menos provechoso. Llegó por expresa petición de José Luis Sierra el año 2016, proveniente de Huachipato y siempre fue visto como uno de los defensores nacionales de mayor proyección.

Pero el Coto se fue antes de lo previsto y Pablo Guede simplemente no lo consideró casi nunca, por lo que volvió a Huachipato. “No lo pasé bien en Colo Colo. Jugué tres o cuatro partidos, fue una mala etapa”, reconoció el zaguero que hoy brilla en Universidad Católica siendo titular indiscutido.

 

Hoy Colo Colo lamenta la falta de jugadores de sus características y ve como jugadores desechados por el club brillan en un rival histórico que domina sin contrapeso el Campeonato Nacional, además de estar en el radar de Reinaldo Rueda para la Roja.