Gustavo Quinteros no quedó muy contento con la repentina partida de Martín Rodríguez al fútbol turco, ya que pierde a uno de sus principales refuerzos y un jugador muy destacado que aportaba desequilibrio en ofensiva. Tras el empate contra Audax Italiano, calificó su salida como algo “terrible”.

“Es irreemplazable, no hay otro jugador como él. Con él ya teníamos un funcionamiento ideal por izquierda con Suazo y con Gil. Me sorprendió, es una pena, no sé cómo se puede haber ido así, un contrato mal hecho”, dijo molesto.

Y su visión respecto al vínculo del Tin no está muy alejado de la realidad. El diario La Tercera reveló el documento que lo desliga del Cacique y muestra que los albos reciben una cifra menor a los 200 mil dólares que se comentaba. Suma ínfima si se considera la importancia que tenía para las aspiraciones de la temporada.

“Las partes ponen término y finiquito al Contrato de Arriendo de Derechos Económicos, en virtud que el Jugador desea ejercer la cláusula de salida estipulada para ser transferido (…) Por los derechos Económicos de don Martín Rodríguez por la transferencia de sus derechos federativos y económicos al club Altay Spor Kulubu recibirá la suma total y líquida de 111.130 dólares”, da a conocer el texto.

Pese a que su llegada se dio en marzo, DaleAlbo había adelantado que las negociaciones para traer de regreso a Martín Rodríguez comenzaron cuando Marcelo Espina aún era gerente deportivo. Esto porque el propio jugador expresaba sus deseos de volver.

Su llegada era sorpresiva, considerando el alto sueldo que recibía en el Mazatlán de México y que era imposible de cancelar por Colo Colo. Por esa razón, el jugador puso una serie de condiciones y rechazó cláusulas elevadas que lo amarraran a quedarse en el Monumental.

Consideraba que volver a Chile podía ser una vitrina en su carrera y por eso no hubo derecho a una contraoferta del Cacique. Ante estas exigencias, a Blanco y Negro no le quedó otra alternativa que ceder o no podía sumarlo al plantel.