La pandemia ha provocado un verdadero descalabro en Colo Colo, donde a nivel institucional ha salpicado por los problemas con la camiseta, la acogida a la Ley de Protección del Empleo o la situación de Leonardo Valencia, mientras que en lo deportivo el equipo no despega y está casi en el fondo de la tabla.

Ante un presente tan malo ha llamado la atención la ausencia de los rostros visibles de Blanco y Negro para dar explicaciones por el complicado escenario que enfrenta el Cacique.

Salvo las declaraciones de Aníbal Mosa en una conferencia de prensa el pasado 15 de julio, donde le puso tarea a Gualberto Jara de alcanzar a Universidad Católica cuando aún no había ni fecha para volver al fútbol, nadie de la concesionaria se ha referido en profundidad a la crisis.

En el momento más malo nadie ha salido a hablar, no han asumido las consecuencias de todas las polémicas que se ha visto envuelto Colo Colo, incluyendo lo de Valencia, donde emitieron un comunicado sólo después de que muchos pidieron una versión del club.

¿Cuáles fueron las declaraciones desde que comenzaron los problemas? El anuncio de enviar a los futbolistas al seguro de cesantía tras fracasar en las negociaciones por un reajuste salarial, Mosa anunciando la vuelta a las prácticas y que quería conversar con los jugadores, además de los protocolos sanitarios que se adoptarían en esta nueva normalidad. Y sería todo.

Cuando hubo que salir a respaldar a un jugador, como fue el caso de Juan Manuel Insaurralde, el propio Marcelo Espina convocó a una rueda de prensa para defenderlo de una publicación que le habían hecho.

Además de estos casos, ninguna ha sido la voz oficial desde Colo Colo para abordar este pésimo momento al interior del club, guardando completo silencio voces tan importantes como las de Aníbal Mosa, Harold Mayne-Nicholls y Marcelo Espina.

Es de esperar que después de la junta de directorio extraordinaria programada para hoy exista alguna versión oficial de alguno de estos actores, sobre todo porque uno de los puntos más importantes será la de definir el futuro de Gualberto Jara en la banca del Cacique.