La búsqueda de un central para reemplazar a Julio Barroso ha sido la principal inquietud de la Daniel Morón en los últimos días. La lista es larga, por un lado, está el deseo de Gustavo Quinteros de contar con un jugador de experiencia. Por otro lado, la propuesta de la gerencia deportiva que apunta a un jugador joven y con proyección.
Franco Calderón, David Mina, Emiliano Amor, Leonardo Coehlo y Lucas Merolla aparecen en la carpeta de la gerencia deportiva. Todos jugadores jóvenes, manejan la posición de central por la derecha y hay altas expectativas en sus promisorias carreras.
Fabricio Formiliano aparece como el hombre de experiencia solicitado por el cuerpo técnico. El defensor de Peñarol tiene 28 años y ya jugó contra el Cacique el año pasado, por la Copa Libertadores. Mide 1,85 m. de estatura y su mejor perfil es el derecho. Tiene contrato hasta diciembre 2021 con el cuadro Manya y su nombre, incluso, estuvo en el radar de Internacional de Porto Alegre, según los medios charrúas.
El zaguero formado en Danubio y con un paso por el fútbol argentino donde defendió la camiseta de Newell’s Old Boys sabe de los rumores, nos atiende con respeto, pero evita hablar de su futuro. “Prefiero no hablar del tema, ahora estoy terminando el campeonato acá y prefiero no mencionar nada sobre eso”, aseguró.
Durante esta jornada se realizará una nueva reunión de la comisión fútbol donde esperan definir qué decisión se tomará con el zaguero central y el centrodelantero. El presupuesto será fundamental a la hora de tomar una decisión.
