Mirko Jozic cumple 81 años, uno de los nombres más importantes de la historia de Colo Colo y del fútbol chileno, que dejó un legado inmortal. El hombre que lideró una verdadera revolución futbolística, dueño de logros hasta hoy inalcanzables para nuestro medio por alzarse con la Copa Libertadores de 1991, y alguien que lleva impregnado al Cacique en su sangre a pesar de estar a más de un océano de distancia.
Antes de aterrizar en Macul, el entrenador de origen croata se había dado a conocer en Chile en el Mundial sub 20 de 1987, donde se coronó campeón con la selección juvenil de la antigua Yugoslavia. Formó un verdadero equipazo donde destacaron jugadores que fueron estrellas del fútbol mundial como Davor Suker, Predrag Mijatovic, Zvonimir Boban, Sinisa Mihajlovic o Robert Prosinečki.
Era un grupo de talentosos futbolistas que desplegaron un juego vistoso y prometía ser uno de los elencos que dominara la escena mundial. Pero lamentablemente, una guerra acabaría para siempre con una generación que tenía todo para ser irrepetible. Los países de la antigua Yugoslavia se separaron y esos jóvenes no volvería a juntarse, pero eso es otra historia.
Cuando se fue de Chile como campeón juvenil, había manifestado su deseo de regresar a nuestro país. Los dirigentes de Colo Colo quedaron fascinados con lo exhibido por don Mirko y lo querían a toda costa en el cuerpo técnico.
Tras arduas negociaciones lo consiguieron. Llegó el 16 de diciembre de 1987, primero como un captador de talentos que forjara un proyecto ambicioso que quería posicionar al Cacique como un protagonista en Sudamérica.
En menos de un año abandonó nuestro país, pero los dirigentes no se dieron por vencidos y fueron nuevamente por él, esta vez para ofrecerle el cargo como DT del primer equipo. Sus antiguas funciones las desempeñaría un ilustre del fútbol mundial, aunque desconocido en esos años: José Néstor Pekerman.
Volvió el 1 de diciembre de 1990 y reemplazó a Arturo Salah como estratega de los albos, quién venía de liderar un proceso exitoso. En su presentación anunció una promesa que para algunos sonaba descabellada: "Mis objetivos son simples, sacar a Colo Colo campeón y llevarlo al título de la Copa Libertadores de América". Aquella frase terminó siendo una profecía de lo que estaba por venir.
Su revolución con sello europeo llegó con un cambio de esquema y Colo Colo se transformó en un equipo agresivo que salía a provocar errores del rival, algo que gustaba mucho a los hinchas. Fue de los primeros en promover el juego con línea de tres en el fondo con la utilización de los stoppers, le encantaban los futbolistas polifuncionales y disciplinados tácticamente.
Su estilo era muy diferente a lo que estaba acostumbrado el jugador chileno, era una persona de pocas palabras y muy crítico en sus exigencias. No importaba si un jugador descollaba en el primer tiempo, si no hacían la presión como el pedía, sencillamente lo sacaba.
La idea de juego era tenía clara. "La intención fue estructurar un equipo polivalente, que cada hombre cumpliese al cien por ciento sus funciones respectivas, pero que, a su vez, aumentaran su capacidad ofensiva. La salida tenía que ser más rápida y fluida. Encontré hombres que asimilaron rápido el sistema y así logramos campeonar y no solo un campeonato, sino que Colo Colo consiguió algo sin precedente en su historia, un viejo sueño el 'tricampeonato', es decir, campeón el 89 (con Salah), 90 y 91", comentó el croata sobre su filosofía futbolística.
El broche de oro lo consiguió ganando la ansiada Copa Libertadores. En esa campaña el equipo eliminó a colosos del continente como Nacional de Uruguay, Boca Juniors y el vigente monarca del certamen, Olimpia de Paraguay. Aquel plantel supo rendir en todos sus frentes y lograron algo que pocos clubes en Sudamérica consiguieron: Ser campeón en la liga local y en el plano internacional. Mirko además consiguió la Recopa Sudamericana 1992 en Kobe Japón y la Copa Interamericana de ese mismo año. Su último título en el Popular, fue el Campeonato Nacional de 1993.
Tras sus éxitos con Colo Colo, es contratado como nuevo entrenador de la Selección Chilena. Sin embargo, la poca comprensión de un medio que no soportaba la idea de tener un extranjero en la banca nacional le motivaron a renunciar.
Su identificación con Colo Colo se mantiene intacta hasta el día de hoy. De hecho, su hija, Lana Jozic, ha publicado orgullosa fotos donde celebró títulos albos e incluso celebró el paso de Croacia a la final del Mundial del 2018 con la indumentaria del Cacique. Además, la familia estuvo muy pendiente de la campaña donde los albos pelearon el descenso y festejaron la salvación como cualquier hincha.
Es la figura de un hombre histórico para el fútbol chileno, sin duda el entrenador más exitoso de la rica historia del club, alguien que puede hablar con autoridad por el sitial que se ganó. Su estilo encarnaba lo que quiere el hincha: un equipo rebelde, agresivo, que es protagonista ante cualquier rival.
Feliz cumpleaños don Mirko Jozic.
