Diferentes lesiones ya han provocado la importante suma de seis bajas para este comienzo del 2020, coartando las opciones de Mario Salas para armar su once ideal. El Comandante se visto obligado a variar, sorteando de buena forma a pesar todo este inicio de temporada.

Los últimos casos conocidos son los de Esteban Paredes y Gabriel Costa. El capitán albo se fracturó cuatro costillas y estará dos meses fuera de las canchas, mientras que el peruano presenta un esguince de tobillo.

Nicolás Blandi también da su propio calvario a Mario Salas, ya que el ex San Lorenzo presento en la antesala del debut en el torneo ante Palestino un desgarro miofascial en el biceps femoral de su muslo derecho, viéndose obligado a estar en rehabilitación kinésica. Esta lesión podría dejarlo tres semanas fuera.

Julio Barroso también ha presentado molestias físicas en este comienzo de año, específicamente en su espalda, perdiéndose el duelo ante los árabes y posiblemente también el de mañana contra Cobresal en El Salvador.

Los casos que se arrastran más en el tiempo son los de Pablo Mouche y Matías Zaldivia. El ex Boca estuvo todos estos meses recuperándose de un desgarro sufrido durante la etapa final de la temporada pasada. El central está entrando en la fase final de rehabilitación luego de sufrir la rotura total del ligamento cruzado de su rodilla izquierda, esperándose su regreso para finales de febrero.

Sin duda que una cantidad no despreciable de bajas con las que Mario Salas tendrá que lidiar en las próximas semanas, donde en un par de fechas más tendrá el primer clásico por el Campeonato Nacional 2020 ante la Universidad Católica.